2022 se ha proclamado como el año de la vuelta a la normalidad. La vieja normalidad. La de verdad, no aquella a la que tuvimos que adaptarnos forzosamente, cuyos directos eran con mascarilla, asiento, a veces incluso sin poder beber… Horrible cuanto menos, la verdad. Y, aunque conciertos he podido ver muchos, bastantes, y muy buenos, en cuanto a discos se refiere no ha sido para menos. Está claro que tanto tiempo sin que las bandas pudieran subirse a un escenario iba a tener como consecuencia una explosión artística de muy buena calidad. Como ejemplo mi ranking, y me dejo unos cuantos más que han estado también muy bien.

1. Ghost – Impera: Siempre confío en la banda de Tobias Forge. Sé que lo que saque me va a encantar. Aunque a la primera escucha pueda sentir ese gusto «agridulce», después, en la segunda o tercera escucha, me roban el alma. Un disco con una producción muy tocha, sonido muy potente y canciones con regusto a «hit». Esta fórmula acaba siendo mi debilidad.

2. Lordi – Humanimals: No me declaro fan de Lordi, pero sí me declaro fan de Alice Cooper, los KISS de los 80, Meat Loaf y todo lo que tenga que ver con Desmond Child. Y aquí en concreto tienen esa clase de canciones. Uno de los mejores álbumes de Hard Rock melódico que han salido en años. Al nivel que fui a verlos en sala con tal de escuchar en directo dos temas de este disco.

3. Satan – Earth Infernal: Sobran las palabras. Ya es sabido por todxs que Satan están viviendo una segunda juventud. Si su legado ya estaba muy bien, con el material que sacan este siglo lo triplican aún más. Con este «Earth Infernal» lo vuelven a confirmar, además de mostrar una faceta un tanto más progresiva pero sin perder su potencial.

4. Magna Carta Cartel – The Dying Option: No supera su predecesor «Goodmorning Restrained», pero han sido muchos años esperando. Por lo tanto, qué menos que recibir «The Dying Option» con los brazos bien abiertos. Nunca sabré definir el estilo de esta banda, quizás una mezcla entre U2, Simple Minds y Jean-Michel Jarre. Lo cierto es que todo lo que sacan es impresionante.

5. Wölfhead – Blood Full Moon: Lxs fans del Stoner/Doom, e incluso del Hard Rock «purpleliano», están de enhorabuena. Once años entre disco y disco hemos tenido que esperar, pero ha merecido la pena, ya que este «Blood Full Moon» supera su anterior trabajo, mostrando una faceta más madura y más arriesgada en su propuesta. Cabe destacar que entre las filas tenemos a dos míticos como Iban «Rasputin» a las voces y Javi Félez en una de las guitarras y en la producción.

6. Toxik – Dis Morta: Si a lxs que hemos tenido la oportunidad de verlos en directo desde su reunión nos han volado la cabeza, treinta y tres años después lo hacen en estudio. Impresionante trabajo de los de Josh Christian, que tiene esos riffs, estructuras y melodías locas que todx fan de Toxik espera, con una formación que nada tiene que envidiar a la de su época.

7. Skid Row – The Gang’s All Here: Skid Row es una de esas míticas bandas de las cuales todavía no me había puesto en serio con ellos, y este nuevo álbum con Erik Grönwall me ha encantado. He de reconocer que Erik en Heat nunca me gustó demasiado, pero aquí me encaja perfectamente y espero que mantengan a este cantante muchos años más para seguir lanzando grandes trabajos como este.

8. Chez Kane – Powerzone: Segundo disco del proyecto de Danny Rexon de Crazy Lixx con la cantante británica, el cual está un pelín por debajo del debut pero sigue pareciéndome muy bueno, ya que el primero no pudo tener su respectiva gira con toda la movida de la pandemia, este servirá para verla el mes que viene por nuestro país.

9. Raptore – Blackfire: Muy superior a su primer larga duración, con una producción magistral y con una corta duración que en estos tiempos de tanta saturación se agradecen. Está claro que con esta formación han conseguido subir un escalón en su carrera fichando por Dying Victims y habiendo conseguido actuar por Europa unas cuantas ocasiones.

10 Saxon – Carpe Diem: Hay que seguir disfrutando de Saxon mientras se pueda. Es increíble que a estas alturas la banda con la mejor carrera de la historia sigan marcándose grandes discos, así como un directo demoledor. No sé cuántos años más de vida les quedan, pero aunque los podamos tener muy vistos, hay que aprovechar todas y cada una de las oportunidades que nos brinden.

Y para acabar, añado:

Razor – Cycle of Contempt: Es sabido que su fuerte nunca han sido las grandes producciones. Todo lo contrario; siempre han sonado bastante «chungos», por decir una palabra. Si no fuese por el sonido tan malo de la batería y la mezcla tan descompensada, sería uno de los cinco primeros discos de la lista, porque los temas la verdad que son muy buenos. Ahora mi pregunta: ¿las malas producciones actuales son peores que las malas producciones de antaño? Da que pensar y para debate.

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