TOP 10 2022: Haizea
Colaboradora ocasional y amiga para todo, Haizea no cree que haya escuchado más de tres o cuatro discos de 2022. Después de darle más vueltas de las necesarias, nos ha enviado esto:
DISCOS:
Death Breath – The Old Hag (7”)
Quince años esperando a que nos den unas migajas, ¡alabados sean!
Bunker 66/Lucifuge – Of Night And Lust
UGH!
Biznaga – Bremen no existe
Quiero meterles pop a los jebis, jebi a los punkis y d-beat a mis padres (spoiler: sale mal). Esta gente hila fino, cada sílaba está en su sitio y a la vez dan un poco de rabia, tú ya me entiendes. «Una historia de fantasmas», caballo ganador.
Cruz – Confines de la cordura
Death metal.
Les Gates – Demo
Demo de 2014 reeditada en formato físico este año por Uterzine/Retroresourcal Movement On Audio Conected Backbooster Turbo Records. A menudo, menos es más.
¿No sabes en qué día vives? ¿Los últimos tres años son un borrón, las cosas se te ponen por delante y no puedes seguir el ritmo cruel de la actualidad? O quizá duermes en un sótano sin ventanas (por el que pagas un precio desorbitado) y sólo escuchas Hellhammer y The Comes porque nada ha vuelto a ser igual desde 1984, cuando tenías -7 años. No pasa nada. Te queremos mucho. Aquí una lista de discos «recientes» que podrían habérsete escapado (y de paso evitamos que me riñan desde Sycamore Zine): Reaper, Viridian Inferno (PEPINAZO METALPUNK, AMIGA); Abyecta, Infrafuturo; split Maggot Heart/Okkultokrati (¡la cara A!); Suicide Club, Because Dead; Aihotz, Matar al Superhombre; Crossspitter, Dry & Grinding Mouth y Mystic Storm, Из хаоса древних времен/From the Ancient Chaos.
LIBROS:
Todos los cuerpos, de Olivia Laing
Los cuerpos son a la vez vulnerables y poderosos, y ocupan un lugar vital en las luchas históricas por las libertades. No venirse abajo por la portada y editorial de mierda, es un ensayo estupendo. Si además te interesa Wilhelm Reich, estás de suerte.
Un lugar sin límites. Música, nihilismo y políticas del desastre en tiempos del amanecer neoliberal, de Alberto Santamaría
Retorno a los setenta, década atravesada por la fricción entre un neoliberalismo incipiente pero no por ello menos abrasador y manifestaciones culturales radicales. En esa estela, hoy cabe preguntarse: ¿han sido todo derrotas o hay fuegos que no se apagan tan fácilmente?
El tarot de Leonora Carrington, de Tere Arcq y Susan Aberth
Un caramelito (de gran formato) para quien le interese la historia del Arte o las tradiciones esotéricas.
Dos veces en el mismo río, de Chris Offutt
Memorias con una sensibilidad acertadísima. Igualmente recomendable su otro libro autobiográfico, Mi padre, el pornógrafo.
Hey! Julio Iglesias y la conquista de América, de Hans Laguna
¡Venga, que os cuelo esta también! Más que una biografía, un análisis distendido pero serio de la maquinaria engrasadísima que produce una estrella global (ahora memeizada).
Otros, publicados más o menos recientemente: Ailoveny Güats, por Ailoveny Güats (necesariamente incómodo porque problematiza lo que solemos entender por «víctima» y agencia; «¡Abajo el trabajo! ¡Que vivan las putas!»); Berg y Tres, de Ann Quin (en lo formal, café para muy cafeteros); What is Anarchist music?, Ruud Noys; Borrokalari transgeneroak, Leslie Feinberg (begirada “berri” bat generoak historian eta gizarte desberdinetan izan duen lekuari, klasearekin, arrazarekin eta sexualitatearekin dituen erlazioez ahaztu gabe).