Aquí esta la banda de Billy Sheehan que acompañado por Dave Constantino y Paul Varga en 1982 nos ofreció uno de los discos con más clase de la historia, un vinilo que en su época me costó 2500 pesetas de importación. Lo vi en un catálogo de Metal USA y mi intuición me dijo que me gastara lo que tenía para salir en esa joya.

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TALAS – Sink your Teeth into that (1982)

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Aquí esta la banda de Billy Sheehan que acompañado por Dave Constantino y Paul Varga en 1982 nos ofreció uno de los discos con más clase de la historia, un vinilo que en su época me costó 2500 pesetas de importación. Lo vi en un catálogo de Metal USA y mi intuición me dijo que me gastara lo que tenía para salir en esa joya.

Aquí esta la banda de Billy Sheehan que acompañado por Dave Constantino y Paul Varga en 1982 nos ofreció uno de los discos con más clase de la historia, un vinilo que en su época me costó 2500 pesetas de importación. Lo vi en un catálogo de Metal USA y mi intuición me dijo que me gastara lo que tenía para salir en esa joya.

Podría llamarse un disco de Hard Rock USA pero para mi es a la vez muy Heavy, así que el termino Heavy Metal melódico podría ser bueno.

10 temas acojonantes, donde trallazos como «Sink Your Teeth Into That», «Hit And Run», «King Of The World», «Outside Lookin’ In» y «Never See Me Cry» resumirían un Heavy rocoso, incluso lento pero pesado y a la vez muy melódico

«Shy Boy», pese a ser el clásico del disco, a mí la verdad no me convence mucho, es una mezcla de bajo speedico a lo VAN HAKEB que no está mal pero vamos, al igual que «Smart Lady» quizás la más floja.
Como temas heavys tenemos «Hick Town» y la joya de la corona, una canción, para mí por lo menos, de las mejores jamás hechas por un grupo, lo tiene todo; melodía, Heavy Metal, clase… es de esas canciones que las vas escuchando y te van dando vida, mucha vida. Una delicia llamada
«Hidh Speed on Ice» (escuchadla quién no la conozca y ya me diréis).
También hay una instrumental llamada «Nv43345» que por la forma de los números parece que quiera haber puesto Sheehan al revés.

Pues éso, un disco de calidad infinita. No hace falta decir que tiene algo que los demás no tienen y son las líneas de bajo y el constante sonido del mismo a lo largo del álbum, destacando del resto aunque sin menospreciar la gran voz de Constantino.

 

Paco Gómez

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