CRÓNICA: LEYENDAS DEL ROCK – Viernes – Lírica magistral a cargo de Hansi (BG) y Tarja, el plato fuerte de la noche

Amanece un día más en Villena y el silencio cada vez reina más en los despertares del camping sombra. Estamos más cansados y nos levantamos mucho más tarde, hay que aprovechar cada minuto para descansar y coger fuerzas.

Intentando evitar las horas de más calor, la organización ha hecho que este año los conciertos empiecen un poco más tarde y los encargados de abrir el festival en esta jornada del Viernes son los canadienses Unleash the Archers. Heavy Metal clásico capitaneado por Brittney Slayes. Un buen grupo y sonido para ir entrando en calor y haciéndonos boca de lo que está por llegar, aunque el día de hoy predomina el heavy más clásico, podremos ver un poco de todo.

En el escenario New Rock están tocando mientras tanto Sylvania que abren la tarde para los más fans del heavy metal nacional, pues son los primeros de un chorro de conciertos nacionales que veremos hoy aquí.

Su fin se junta con el inicio de la banda finlandesa Tarot. Servidora es la primera vez que los ve y que sabe de ellos. A veces me doy un repasito por esas bandas que no me suenan pero con una simple escucha sin llegar a indagar me quedo un poco igual. Para los que no los conozcáis, Tarot son considerados como los padrinos del Heavy Metal finlandés, fundados en 1985, y se dieron a conocer por la canción Wings of Darkness. Para ir un poco más allá, su cantante y guitarra es Marco Hietala y si os digo que fue miembro de Nightwish a partir del 2002 seguro que ya os acerco un poco más a saber quién es el.

Landevir son los siguientes en el panorama nacional de salir al New Rock.

Su show que ya reúne varios centenares de seguidores conecta con el ambiente festivalero, con bailarinas de danza del vientre, confeti y grandes globos que saltaron de unas a otras manos por el recinto dando por acabado su concierto.

Llega el momento de dividir a los sectores del público, el hardcore metal vs el heavy clásico que está siendo el protagonista principal de la velada.

Bury Tomorrow alzan el polvo del recinto con los discretos pogos que están originándose mientras ellos descargan toda su garra sobre las tablas. Para ser un grupo de hard core metal parece que el público está un poco apagado y eso que son realmente buenos, pero los días que son así tan de contrastes se nota un poco más la división del público.

En cambio, cuando en el escenario de al lado aparece Saratoga, el recinto ya empieza a estar bien lleno y Tete se marca un concierto buenísimo. Pura pólvora en el escenario de un lado al otro, interactuando con el público, cambiando las letras de las canciones por palabras como Leyendas, Villena, Niko, etc. Diversión y disfruta a partes iguales con los de madrid, que nos hacen un viajecito por los temas más nuevos hasta los más antiguos como Perro Traidor, ¿casi casi se podría decir que nos están haciendo una comparativa entre Tete y el concierto que nos dieron anoche Leo Jimenez? El listón se queda alto, pero Tete defiende muy bien los temas de La Bestia.

«Devolvemos la conexión» al escenario Jesús de la Rosa para reactivar el modo destroyer con While She Sleep, metalcore cañero, aunque un poquito subido de agudos según en la zona del recinto en la que te encontrarás. Esta vez sí, el público se animó a hacer unos buenos moshpits, crowd surfing sin fin, donde servidora se volvió a liar la manta a la cabeza y se metió de lleno a surfear el Leyendas, un enorme wall of death, de los más grandes que se han visto en esta edición, que no se muy bien si es que el público se está guardando las fuerzas o que este año están un poco más relajados.

En acabar llega el momento de una de las bandas cabeza cartel de la noche. Blind Guardian que hacen su actuación estelar. No soy la única que con la actuación de hace dos años se quedó bastante fría y descolocada, ya que ni el setlist ni las condiciones del escenario parecían las más óptimas para una banda como ellos. Esta vez nos quitamos la espinita. Ya salieron con Imaginations From the Other Side, pero es que hubo de todo, un repaso por todas las canciones de sus discos, y los temas más punteros como Nightfall, sin olvidarnos de las míticas, The Bards Song, Lord of the Rings, Mirror Mirror y Valhalla. No cabía ni un alfiler en el recinto, había gente por todas partes, era imposible dar un paso así que de donde te hubieras colocado durante la tarde no podías moverte.

No tengo palabras ni calificativos lo suficientemente válidos para explicaros lo que fue este concierto tan emocionante y vibrante, y después compartiendo opiniones con otras personas coincidimos totalmente en el mismo sentimiento.

Tarja también era otro cabeza de cartel de la noche de ayer, pero tras BG se hizo un vacío algo significativo, y el movimiento por la zona del escenario se hizo más fácil, incluso exceptuando la parte central del escenario, se podía ir adelantando posiciones para poder coger un buen sitio para verla de las décimas filas hacia atrás.

Reconozco que desde que Tarja salió de Nightwish dejé de seguirla (tanto a ella como a Nightwish), ya que la lírica me da un poco de pereza, al menos para escucharla en casa. Si que hay que decir en pro de la actuación, que verla y disfrutarla en directo es otra cosa. Si además le sumas la aparición de Marco Hietala y el tocar Wish I had an Angel y para acabar la actuación o Over the Hills and Far Away… creo que sobran las palabras. Un dúo de magia pura.

Llegaba el final de la noche con los grandes Lepoka, que ansiosos estábamos ya los que quedamos de pasárnoslo pipa con ellos. Se nota que juegan en casa y que ya se conocen más que de sobras este escenario.

La diversión está asegurada con ellos pero también la emoción, como cuando la chica de Dani le sacó un pastelito para que Dani soplara las velas por su cumpleaños, y cuando además aprovechó la ocasión y le pidió la mano delante de las cientas de personas que quedamos allí congregadas. ¡Este Leyendas está siendo la edición de las pedidas de mano!

Solo podemos desearles desde aquí toda la felicidad del mundo y ¡muchos conciertos!

Acostumbrados a sus fiestas sobre el escenario, vimos fuegos, humo, bailes, saltos, momentos de agacharse, más crowdsurfings y gargantas desgañitadas.

Lépoka siempre son un broche de oro para el cierre de fiesta y después de ellos, salir por las puertas del recinto canturreando y bailando para coger la cama y descansar.