EDEN – Rock bar Lakademia 04/07/2009
Aunque el concierto estaba programado para las 21:30, tal y como figuraba en el cartel, tuvo comienzo a las diez menos diez aproximadamente. Los primeros en tocar fueron Anywhere, grupo que solo había escuchado a través de los temas de su Myspace. Durante unos 50 minutos nos dieron buena dosis de heavy metal, con temas como «Sombras del ayer». Eso sí, tampoco faltaron los sentimientos dulces, ya que nos ofrecieron dos canciones de suaves melodías, en las que la protagonista era la voz. Intercaladas entre todo esto, también hubo lugar para dos versiones, «You give love a bad name» de Bon Jovi y «Aces high» de Iron Maiden, que aunque no encajaran en su estilo propio, supieron defender. No faltaron tampoco los efectos visuales, tales como ventiladores y luces de flash. Todo ello nos hizo pasar un rato agradable, aunque fueramos poco al principio. La puesta en escena también fue buena, llegando el cantante a subirse incluso encima de la barra en cierto momento de la actuación. Conclusión: ganas de repetir
A continuación, y solo lo que duró el cambio de instrumentos, salieron al escenario EDEN. A excepción del tema homónimo de su segundo álbum, “Sombras de un adiós”, el grupo nos deleitó con todos los demás temas de este segundo trabajo, así como “Polvo de diamantes” canción de su anterior cd, al cual su vocalista actual, Jorge Sanz, le da su toque personal, que nada tiene que envidiar al anterior cantante. La rapidez de “Cuervos” y el fácil estribillo de “Agotados” nos hicieron corear a todos los presentes; “Dios del mal” nos llevo a cabecear como lo harían los primeros heavys de los 80. La sentimental “A medianoche” nos dejo relajarnos un poco, dada la energía que los asturianos derrochan en el resto de temas. Quizás el momento de mayor auge llegó con”Desnuda tu espada”, canto a la libertad frente a la opresión que sufrimos en muchos temas, sobre todo en la música, y más aún, en el heavy metal.
A destacar la contundente presencia del batería Iván Sevillano, que nos regaló un momento de auténtica estrella subiéndose a la silla para saludar, algo que siempre se agradece. Los guitarristas Javier Díaz y Alex del Río supieron hacer un buen dúo cañero y equilibrado. La base a cargo del bajista Cristian Iglesias, último en incorporarse a la formación pero no por ello menos importante y la ambientación de teclados de Vicente Fernández, completa esta formación , que ya han dado que hablar en muchas publicaciones y, de seguro, lo seguirá haciendo, como demostraron el sábado en Avilés. Una gran actuación de los asturianos, que incluso me atrevería a decir la mejor de las que he presenciado, y desde luego, un orgullo estar entre su público.
