NACHTMYSTIUM – Doomsday Derelicts (EP)
¡Sí! ¡Los de Chicago vuelven! Pocas veces me había alegrado tanto, después de tan sólo un año, de escuchar algo nuevo de la banda… ¡y siendo un EP! Y es que éstos chicos de Illinosis han vuelto con este EP de cuatro temas en poco más de un cuarto de hora llamado "Doomsday Dereletics", tras editar en el 2008 su último larga duración, "Assassins: Black Meddle Part I".
¡Sí! ¡Los de Chicago vuelven! Pocas veces me había alegrado tanto, después de tan sólo un año, de escuchar algo nuevo de la banda… ¡y siendo un EP! Y es que éstos chicos de Illinosis han vuelto con este EP de cuatro temas en poco más de un cuarto de hora llamado «Doomsday Dereletics», tras editar en el 2008 su último larga duración, «Assassins: Black Meddle Part I».
Todos sabemos la peculiaridad de su música y su carrera irregular, por decirlo de alguna forma. Comenzaron siendo más extremos, con una música mezcla de Black y Death (siempre mucho más cercana al Black) para terminar siendo, en los últimos trabajos, una especie de Black psicodélico, con unas atmósferas realmente especiales.
Pues con este EP vuelven, en cierta medida, a sus raíces. Y es que quizás, sea su álbum más extremo en varios años, aún así no han dejado de lado el sello que les ha hecho ser Nachtmystium en sus últimas entregas. Hay gente que cree que el sonido del Black Metal se puede clasificar en dos dos conflictivos grupos: aquellos que se mantienen fieles a sus raíces y los que introducen nuevos elementos. Los primeros creen que su música debe ser minimalista, grabado con la guitarra-bajo-batería estándar y con una producción de garaje. Blake Judd, cantante y guitarrista de la banda, esta de acuerdo con este pensamiento y se niega a calificar de Black Metal a su banda después de alejarse de su sonido típico.
«Doomsday Derelicts» tiene la mezcla de influencias de siempre; Beherit, Autopsy, Blasphemy… todo parece una mezcla de Black, Death y Thrash. El tema que abre el redondo, «Bones», es un tema de Black Metal con una genial y personal atmósfera, voces profundas y un blast repetitivo acompañado de unos riffs de guitarra bastante peculiares, que es una de las cosas que más destacan del plástico. Además de sonar bastante «thrashers» también cuenta con unas partes más lentas que podrían recordarnos a la mejor etapa del Death Metal escandinavo, si no fuera por la atmósfera helada que reina en todo el tema. «Life of Fire» es un tema mucho más pegadizo, melódico y «easy-listening» en el que intercalan unas geniales partes todavía más melódicas de lo que en general es el tema, acompañadas de nuevo, de unos geniales riffs que le dan al corte un aire melancólico. Todo ésto por no mencionar el gran solo de guitarra que incluye. El tercer tema es «Hellish Overdose», un tema con sonido gamberro, rápido, o quizás podríamos decir con cierta influencia Thrash y no únicamente en los riffs, lo cierto es que el ritmo de la canción me recuerda al mítico «Crazy Nights», de los nipones Loudness. Sin ningún tipo de duda la más rock n’ rollera de todo este EP. Por último, a modo de despedida, tenemos «Pitch Black Cadence», el tema más blacker de este trabajo, con un grito desgarrador de Blake a modo de inroducción al tema. Todo este track tiene un sonido grandioso y épico, con una batería realmente bestial y una mezcla de ritmos ejecutada con gran maestría. Mezclan esas partes de Black Metal old school con algunos pasajes prácticamente épicos, pesados y repetitivos de una forma envidiable para más adelante dar paso a los segundos más frenéticos del tema, con unas guitarras realmente matadoras y rapidísimas que encajan perfectamente con la voz más caracterísitcas de Blake que escuchamos en todo el EP, mezclando su voz profunda con unos gritos histéricos. Tampoco hay que olvidarse en ninguna ocasión del teclado, ulitizado tanto como elemento electrónico de distorsión como a modo de piano.
Nachtmystium pueden o no gustar, lo que está claro es que tienen huevos para hacer lo que quieren sin importarles las «reglas» de un género que, a su forma, parece estar regimentado como ningún otro. Son un claro ejemplo de cómo evolucionar, de cómo mezclar elementos y cómo seguir siendo una banda con credibilidad. Ningún elemento de los que utilizan es realmente único, pero sí os puedo asegurar que son de los pocos que los fusionan con tanta clase. ¡Estos riffs se quedarán en vuestras cabezas durante varios días!
Candlelight Records (2009)
Puntuación: 7,5/10
