SKALDIC CURSE – World Suicide Machine
Inglaterra siempre ha sido uno de los países más importantes en lo que se refiere a Heavy Metal, pero dentro del Black las bandas que pertenecen a él se pueden contar con los dedos de una mano. Afortunadamente, a esta pequeña variedad de bandas de Black Metal ahora podemos añadir una más.
Inglaterra siempre ha sido uno de los países más importantes en lo que se refiere a Heavy Metal, pero dentro del Black las bandas que pertenecen a él se pueden contar con los dedos de una mano. Afortunadamente, a esta pequeña variedad de bandas de Black Metal ahora podemos añadir una más.
La historia de los ingleses Skaldic Curse comienza en 2000 pero no sacarían hasta el 2006 su primer álbum, «Pathogen» y con este segundo «World Suicide Machine» es donde la banda realmente ha encontrado su sonido y personalidad.
Skaldic Curse toman todos los tópicos del Black Metal: individualismo, misantropía, sentimientos extremos… pero los mezcla de una forma innovadora añadiendo elementos de todo tipo de Black Metal y dando un toque progresivo. Podemos escuchar partes muy rockeras que nos recuerdan a los actuales o primerísimos Darkthrone, pero si nos tienen que recordar a alguna banda seguramente sería a Mayhem, no sólo al «De MYsteriis Dom Sathanas» (auqnue las comparaciones son odiosas) sino también a la era Blasphemer. Por supuesto, tienen un trasfondo progresivo indudable el cual no esconden ya que en su biografía dicen que están muy influenciados por Rushb y lo cierto es que nos lo dejan bien claro.
Su guitarrista, Scapula, es Paul Scanlan, de sus compatriotas Akercocke, y no deja de dar a la banda más de un sonido que nos pueden recordar perfectamente a los de Londres, siendo Skaldic Curse menos técnicos.
Las voces raspadas son bastante simples pero correctas, las guitarras más técnicas son uno de los sellos personales de la casa y la producción un punto fuerte en el grupo; cómo es de esperar en una banda de este tipo, es limpia y trabajada pero sin ser pulida del todo, dando un toque al Black de la vieja escuela.
Un disco variado y original, pero no de demasiado fácil escucha y que en algunos momentos se puede hacer cansado con sus ritmos repetitivos, de disfrute en pequeñas dosis hasta que dejas de prestarle atención. Aún así, se trata de un grupo realmente innovador y con ideas interesantes.
Dark Essence Records (2009)
Puntuación: 6/10
