CRÍTICA: OSTROGOTH – Full Moon’s Eyes / Ecstasy and Danger / Too Hot / Feelings of Fury (reediciones)

Nos encontramos ante las rediciones de los primeros trabajos de esta legendaria banda belga tan querida por el underground metálico y que tan buen sabor de boca y discos dejaron en sus inicios. Haremos la crítica del tirón ya que, en mayor o menor medida, pero con algunos matices nuevos según el disco, las sensaciones son parecidas.

así que nos dirigimos al principio, a aquel EP que los presentaba llamado ‘Full Moon’s Eyes’, donde podemos encontrar cosas NWOBHM, como Maiden (influencia más que obvia en los riffs y melodías) o Saxon, pero también mucho del por aquel incipiente speed metal de bandas como los ingleses Jaguar o Raven. Además, sin dejar de acordarnos de las bandas de US power como Omen, Savage Grace o Jag Panzer, con unos riffs oscuros y afilados, estribillos puros, emotivos y representativo de lo que es el heavy metal. Este sonido se afianza en el siguiente disco, ‘Ecstasy and Danger’. Lo mismo; heavy metal con sabor añejo y dos cojones, con ese toque entrañable de pura maestría metalera y cierto aire de rebeldía juvenil que apasiona. Muy 80tero. Con frenesí, ritmos más rockeros y sobre todo la NWOBHM, con sus sentidos solos sacados del mismísimo Killers. Y claro, también con esa faceta que empalma tan bien con el power US cosa que ocurrirá en el siguiente disco llamado, ‘Too Hot’. Un álbum apretado, crudo con solos son melódicos y riffs asesinos. El sonido de Ostrogoth cambia algo, la banda se volvió aún más en la línea del heavy y el power metal con un álbum que es pegadizo como el infierno a lo power US.

Y acabamos con lo que era su cuarto largo, titulado ‘Feelings of Fury’, que es el más curioso porque parece que sea el primero. La banda sigue su proceso de temas clásicos, pero pierde esa limpieza antes adquirida y se convierte en algo denso, muy underground, como si de un primer disco se tratara. Eso sí, tiene un sonido muy cavernoso, primitivo. Una obran con más suciedad que los anteriores, pero con respeto a la tradición metálica, buenos riffs electrificados, estribillos potentes y un punto más oscuro a la vez que rockero, también rico en melodías agresivas y lirica épica.

En definitiva, unos buenos discos para conocer en profundidad a una de las bandas más respetadas del underground de los 80.

High Roller Records (2023)

Puntuación: 8/10