CRÍTICA: SPECTRE – Lonesome Gambler (EP)

Nos encontramos ante este EP de los australianos SPECTRE. Después de algunos singles y algún split desde 2017, aquí tenemos este EP de cuatro temas más cinco bonus. Se trata de un grupo de influencias añejas de los 60 y 70 con aire melódico, hard y protometálico que comienza con ‘Hero of the Illusion’, con unas notas de guitarra y un sonido que ya reflejan por dónde van los tiros. Unos riffs limpios y biensonantes con aire setentero, envolvente, con una cierta magia a lo URIAH HEEP, con unas voces celestiales a veces apoyadas doblemente, que le da un empaque místico. El corte sigue a un ritmo constante con unos riffs duros, pero sin abusar, acompañado por unos punteos clásicos y solos adictivos.

Le sigue ‘Wolfsbane’, con un inicio sintetizado cósmico que se adentra en unos riffs más metálicos con un ritmo a los primeros MAIDEN. La canción tiene un poco más de contundencia sonora en general; los riffs se van endureciendo en una pista de tono vocal más a lo OZZY, con cierto sabbatismo oscuro apoyado por unos coros que van saliendo de la nada, pero quedan de lujo. Y donde los solos tienen más envoltura y elaboración.

Casi lo mismo ocurre en el tema título, ‘Lonesome Gambler’. También con un sonido más alto, pero igual de emotivo, con unos riffs bonitos, una voz más azucarada, con más melodía Hard y dureza protometálica. Además de uso solos más punzantes y adictivos.

Y acabamos el EP con ‘Turning the Wheel’. Una pista con cierto aire más épico, con unos golpes de riffs potentes y endurecidos acompañados por unos sonidos sintetizados muy agradables, relajantes y Space Rock. En cambio, la voz es lenta, dulce, agradable, de fácil escucha, con unos tonos muy de los 70 y unos punteos muy a lo DEMON.

Y hasta aquí el EP. Ahora vamos con los bonus, que son los singles anteriores, que van del 2017 al 2022, y donde tenemos temas como ‘Drifter’, con un tono rockero a medida, no demasiado fuerte pero convincente, con esas melodías melancólicas pero que no deprimen, si no todo lo contrario. Efluvios a la NWBHM en sus riffs y pasajes ambientales al estilo DARK HEART o SARACEN.

Le sigue ‘The Black Jewel’, una baladita pero de aire oscuro y adictivo, sinuosa y placentera, que crece hacia un tema con aire medieval, clasicista, con unos solos muy sentidos.

En cambio, en ‘Hard Attacks’ la cosa gana velocidad. Un corte más estándar dentro del Heavy tradicional, con más ímpetu instrumental y vocal, con cierta agresividad en los riffs, pero sin molesta. Y unos buenos y épicos estribillos. Lo mismo ocurre con ‘Silver Invaders’ y ‘Stand Alone’; NWOBHM en estado puro. Riffs clásicos con armonías británicas, algún efecto especial, punteos que van y vienen sobre una base speedica sin abusar y un tono vocal más Heavy.

En definitiva, un trabajo medido al género, que engancha rápido y bien.

Dying Victims Productions (2023)

Puntuación: 7/10