CRÍTICA: NECRONOMICON – Constant to Death

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Los veteranos NECRONOMICON, que nunca han dejado de estar en la brecha y se han mantenido como una banda bastante activa, regresan este año con un nuevo álbum (su decimosegundo) donde, si algo destaca, es la energía y la caña. Un ‘Constant to Death’ que no decepcionará a fieles del grupo.

‘Constant to Death’ abre el disco. Es un medio tiempo brutal, al estilo, ‘Violent Revolution’ de KREATOR pero más corrosivo y asesino. Unos riffs potentes, thrashers, con unos pasajes sónicos hipnóticos y oscuros, y una voz terriblemente oscura. Le sigue ‘They Lie’ y ‘Poverty Show’. Esto ya es Speed Thrash a lo burro. Una velocidad controlada y descontrolada a la vez en unos cortes poderosos y afilados. Directos a la yugular. Lo mismo que ‘Redemption’ y ‘The Blood Runs Red’. Estas con más pausas y cambios de ritmo, pero también frenéticas y agónicas, con unos riffs que golpean como puños. Trepidantes y macabras. Con unos solos endemoniados.

Otras, como ‘Children Cry Alone’ o ‘Stored in Blood’ son una maravilla. Unos temas de Speed Thrash con unos cambios trepidantes, a lo JUDAS PRIEST, además de unas estrofas y estribillos muy pegadizos, más unos solos muy místicos. En cambio, en ‘The Guilty Shepherd’ o ‘Down for Above’, la cosa se pone oscura. Temas más Doom, con acordes de Black Metal, incluso algún elemento gótico y paisajista, con una voz que, a medida que pasa el disco, te engancha más, con ese tono desagradable magníficamente interpretativo.

Continuamos con ‘Bloodrush’ y ‘A Voice for the Voiceless’, donde la cosa se pone más clásica, con sus riffs metalizados pero con unos estribillos y estrofas más cantables, muy a lo ALICE COOPER. Y unos solos más elaborados. De hecho, las canciones suenan muy a lo horror show, al estilo ALICE o LIZZY BORDEN. En cambio, en ‘Black Rain’ el tema se pone rocoso, primitivo. Con unos riffs escandalosos, sin espacios, densos. Con una voz más narrativa, con ese desgarro y vómito sangriento. Tiene sonido ‘Jugulator’. Y, de pronto, te cambio de ritmo a unos sonidos misteriosos muy de film de terror para volver a los riffs y unos solos muy adornados.

Y acabamos con ‘Outro’. 1:51 minutos de outro final con sonidos bajos y sensibles.

El Puerto Records (2023)

Puntuación: 8/10

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