CRÍTICA: Siege of Power – This is Tomorrow
Tengo que confesaros una cosa, así, sin medias tintas: estoy enamorada de este disco. El Death es catarsis en estado puro.
Este es el segundo álbum de Siege of Power (efectivamente, como la canción de Napalm Death), y espero que sigan haciendo música mucho tiempo, el primer álbum, titulado ‘Warning Blast’, lo sacaron en el 2018, así que se han hecho de rogar y, a pesar de ello, la espera ha merecido la pena.
Vayamos por partes. Según ponemos el álbum, la primera canción que nos encontramos es “Force Fed Fear”, con una batería y una caña alucinantes, con unos riffs de guitarra muy potentes, y creo que no podrían haber elegido un tema más brutal con el que abrir el disco, aquí hay thrash del bueno. En esta misma línea y con unas melodías muy pegadizas tenemos “Sinister Christians” y “Scavengers”. En el primer tema la voz es mucho más desgarradora y cobra un protagonismo mayor la guitarra de Paul Baayens, mientras que en el segundo el ritmo es algo más lento, pero sin perder nada de dinamismo. Retomamos velocidad con el tema titulado “Zero Containment” y “The Devil’s Grasp” y volvemos al sonido de batería espectacular, muy rápida y ensordecedora, sería imposible no destacar el solo de guitarra desgarrador en este tema.
A partir de este momento hay un cambio, vamos a ver como el Death/Thrash van a tener un affaire con el Doom, no en vano dos de sus integrantes: Paul Baayens como guitarrista y Bob Bagchus a la batería han sido o son miembros de Asphyx, Theo van Eekelen de la banda hermana Hail of Bullets, por no mencionar a Chris Reifert. Esto lo vamos a detectar en temas como “Ghosts of humanity” en el que todavía no se ven claros los tintes de Doom, pero ya empieza a tener rollo. Cuando ya se hace completamente evidente es en “Deeper Wounds”, en la última pista del álbum que es justo la que le da nombre “This Is Tomorrow” y en “As the Worlds Crumbles” en ellas se siente la atmósfera envolvente, mucho más lenta y pesada y con algunas vocales más agonizantes, dando esa sensación de desesperación, además con unos solos de guitarra precioso s en especial el de “As the Worlds Crumbles” y un sonido de bajo muy potente sobre todo hacia el final de “Deeper Wounds”.
En resumen, creo que es un álbum que da lo que promete: mucho death y thrash de la vieja escuela con un rollito muy ochentero y además, esos toques de Doom en algunos temas que quedan especialmente bien.
Metal Blade Records (2023)
Puntuación: 8/10
