PRIMAL FEAR – Best of Fear
Nos encontramos ante “Beast of Fear”, el último trabajo de PRIMAL FEAR en forma de recopilatorio. Aunque la reseña sea ya en este 2018, este álbum salió a finales del 17, y nos encontramos como una segunda parte recopilando tema que van desde el “New Religion”, de 2007, hasta su última obra, “Rulebreaker”, de 2016. Eso sí, con cuatro canciones nuevas que va a ser con lo que empecemos. Así, nos encontramos con “Area 16”. Una breve intro con cierto sinfonismo épico nos introduce en “Predator”, con un arranque metálico, con esa influencia PRIEST en riffs y solos cruzados, pero con un sonido más endurecido, aunque con esas características modulaciones vocales, melodías y coros.
Le sigue “If Looks Could Kill”. Ese tema de riffs constante y de pista. Una canción dentro de los estándares más clásicos; con fuerza, melodía y buen gusto, al estilo de sus primeros discos. Y acabamos los cortes nuevos con “Thrill of Speed”, también con elementos clásicos. Mucho JUDAS. Mucho Metal alemán. Esa clase de canciones a caballo entre SINNER y PRIMAL, con esos pasajes tan metálicos a lo PRIEST y esos momentos tan épicos y desgarrados a lo SINNER. Y bien, ya metidos en lo que es la colección que la banda ha escogido para el recopilatorio, nos encontramos seis cortes del “Rulebreaker”, de 2016. “The End is Near”. Un buen tema de Metal sólido, rocoso, entre medio tiempo y Metal clásico, con muchas fases a lo SINNER. Lo mismo que en “Rulebreaker”, aunque esta contiene más melodía y es más un medio tiempo. “Angels of Mercy” es metálica, abrasiva, con buenos riffs y coros. Mientras que “In Metal we Trust” es la velocidad con ese sentimiento PRIEST que nunca debe faltar. “We Walk Without Fear” son once minutos llenos de Metal, épica y sinfonismo, y cambios de ritmo con contrastes agresivos y melódicos. Y terminamos la lista de este trabajo con “The Sky is Burning”. Esa Powerballad de corte ochenteno, sentida y adictiva, con su subidas y bajadas rítmicamente sublimes. Del 2015 hay cinco temas que pertenecen al “Delivering the Black”. “King for a Day”. Sonido y arranque británico a lo PRIEST, con potencia vocal, buenos estribillos y solos excelentes. Le sigue “One Night in December”, un medio tiempo pomposo y sinfónico más cercano a unos ROYAL HUNT, aunque con unas fases muy alemanas clásicas a lo HELLOWEEN. En cambio, “When Death comes Knocking” tiene ese ritmo a medio tiempo pero con matices más místicos, sonidos más alargados y unos solos muy armónicos. Y estribillos melódicos. Y termina la tanda de este compacto con “Born in a Broken Heart”, otra Powerballad de sentimiento ochenteno. Del “Unbreakable” tenemos seus tenas, “Unbreakable II” es un tema que podría estar en este disco o en cualquiera de SINNER. Un riff constante y metálico con buenos cambios de ritmo a nivel vocal, tan agudo como melódico y desgarrado cuando cuadra. “Strike” es un tema más speedico, pero también más mecanizado en los riffs. Suena a Metal porque la voz aquí es un lucimiento constante de registros, acompañado de unos buenos coros y unos solos híper metálicos. “Bad Guys Wear Black” es sencilla, simple, pero efectiva. Una canción metálica con contrastes de velocidad, desde el medio tiempo a riffs constantes y melodía en los solos, con un estribillo cojonudo. “Where Angels Die” son ocho minutos con momentos tan duros como melódicos, buenas entradas de riffs duros con la increíble voz de Ralph. Y acabamos con “Born Again”, una balada con un toque intimista pero con unas subidas épicas y sentidas. Seguimos bajando de año y nos encontramos con cuatro temas del trabajo llamado “16.6”, del 2009. “Riding the Eagle2 es Metal a cabalgadas sónicas, riffs alargados con momentos vocales al unísono y, como siempre, estribillos tan pegadizos, de puño en alto. A continuación está “Six Times Dead”. No es de mis favoritos, suena más moderno y mecanizado, pese a tener unas fases bastante épicas en términos vocales y corales, que llega a enganchar por momentos. En cambio, “Black Rain”, con un inicio muy arábigo y místico, son casi siete minutos entre Ballad y Power, con su habitual fuerza cuando es necesaria y su melodía general. Y acaba esta tanda con “Hands of Time”, una balada al uso pero concierto sabor sureño y Hard melódico. Y acabamos con los cuatro cortes que conforman lo que aquí hay del disco “New Religion”, de 2007. “Sign of Fear” suena cruda y rocosa instrumentalmente, pero a nivel vocal es PRIEST total, con un alardce de tonos vocales excelentes. Le sigue “The Man”. De nuevo, una de esas composiciones pomposas, con regusto a Powerballad, con subidas y bajadas metálico/sinfónicas. “Everytime it Rains”, con la ayuda de una voz femenina muy a lo gótico, e incluso operístico, es un corte con cierta sinfonía pero, sinceramente, no cuadra mucho en lo que representa el grupo. Y terminamos con “Fighting the Darkness”. Casi nueve minutos divididos en actos donde encontramos todos elementos que esta formación suele incluir en este tipo de canciones: buenos cambios de ritmo, buenos juegos vocales aunque, al igual que la anterior, tiene también un toqué gótico oscuro.
En definitiva, si perdiste la pista de esta banda a principios de la década o la has seguido desde sus inicios, aquí una buena prueba de estos últimos años. Y es que, sin darnos cuenta, ya llevan lo suyo en el panorama metálico, y es de agradecer.
Frontiers Music (2017)
Puntuación: 8/10