En la mitología sumeria se considera a Enki un dios creador, que da vida a otros seres. Y así se titula el nuevo álbum de MELECHESH, una perfecta ofrenda al antiguo dios. Y un título perfecto (no tan solo por las temáticas babilónicas, asirias y mesopotámicas) ya que, como el dios sumerio, el grupo ha consigue crear, dar vida, dar nacimiento a un arte. Como siempre hacen, puesto cada nuevo disco de la formación es un ente nuevo plagado de creatividad y de su sello único.

Pero «Enki» es el súmmum. Es el ser supremo. La corriente de Nun. Porque, com siempre, descargan y plasman su propia visión del Black Metal, con una perfecta comunión entre melodía y agresividad, sin dejar de resultar tremendamente brutales. Además incorporan, no solo influencias de música oriental, sino también instrumentos orientales que encajan perfectamente con sus letras mitológicas en las que se puede leer mucho entre líneas. De esta forma la música es pesada, arrolladora en ocasiones, abrasiva y corrosiva siempre, emocional, también a veces sutil, pero siempre cautivadora e hipnótica, incluso con momentos etéreos. Por otro lado, en esa pesadez influye mucho la labor guitarrera, tanto con 6 como 12 cuerdas, pero también la profundidad y audibilidad que ha ganado el bajo, a veces hasta usando un bajo acústico. Cómo no, también grandes solos y una batería muy creativa, con cierto toque Thrash en combinación con riffs black metaleros y el groove que siempre descargan. De esta forma «Enki» resulta una de las obras más densas de la formación hasta ahora, pero también desarrollada, con muchas capas y mucha profundidad. Por otro lado, como siempre, Ashmedi un vocalista enorme, con un sello distintivo. Dos tipos de registros, ambos violentos, pero poco habituales dentro del género. Personalidad no le falta a MELECHESH, en ningún aspecto.

El compacto está formado por 9 temas largos, todos ellos con sus detalles e identidad propia, de esos que tienes que escuchar más de una vez para disfrutar por completo. Esto, además de la enorme creatividad que se percibe a lo largo de todo el plástico, lo convierte en uno de sus lanzamientos más ambiciosos, incluso incorporan más dosis de Rock, como en el medio tiempo «The Pendulum Speaks», mientras que «Doorways to Irkala» es muy época, y «Enki Divine Nature Awoken» es tremendamente feroz. Enorme. Extrema. Aunque posiblemente el corte que mejor describa toda la obra, su técnica, creatividad y calidad sea la sublime «The Epigenesis».

Pero las sorpresas no son solo a nivel musical, sino que también han contado con varios artistas invitados, como Max Cavalera a la voz de «Lost Tribes», Sakis Tolis también a la vez en la ya mencionada «Enki Divine Nature Awoken» y el gran solo de Rob Caggiano en la no menos grande «The Palm the Eye and Lapis Lazuli».

Por otro lado, una vez más el sonido es perfecto: grande, imperioso, limpio, natural… Han encontrado su sonido perfecto, perfectamente equilibrado.

 

«Enki» es un paso adelante, una verdadera evolución. Posiblemente su mejor trabajo hasta la fecha, y siempre poniendo ese sello distintivo que han logrado crear con los años.

 

Nuclear Blast (2015)

Puntuación: 9/10

Tania Giménez

tania@queensofsteel.com

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