Parce que fue ayer cuando se lanzó «Art of Work», el primer trabajo del trío sueco de AOR WORK OF ART, el cual fue sucedido por «In Progress» y ahora, tras tres años de espera y altas expectativas, la formación regresa con su tercer trabajo, «Framework». Con su álbum debut la banda nos dejó boquiabiertos, con su segunda placa no fue para menos, aunque posiblemente no sorprendieran como con su primer redondo, y es lógico; WORK OF ART ya no es un grupo nuevo (aunque sí joven) que sorprende, sino una banda con una gran reputación que tiene el difícil reto de, por lo menos, igualar sus anteriores discos ante el ojo crítico de sus exigentes seguidores. Reto que no es fácil, en absoluto, pero aún así lo consiguen. Y es que ser excelentes parece estar en su ADN.

Como decía, cada nuevo compacto de WOA es una nueva reválida, y por el momento cumplen. Posiblemente vayan sorprendiendo cada vez menos, pero la calidad está en su sangre, por ello veo prácticamente imposible que «Framework» no vuelva a dejar más que satisfechos a sus seguidores (a pesar de que siempre vayan a esperar más de ellos), incluso veo difícil que «Framework» no entre en las listas a final de año de los mejores discos de 2014 dentro del género. Y es que, como se suele decir, si la receta funciona, ¿para qué cambiarla? Ese parece ser el lema a seguir del trío escandinavo, no arriesgan, repiten su fórmula, pero es que esta no deja de ser terriblemente efectiva. Son AOR en estado puro, de ese que nos lleva de vuelta a finales de los 70 y principios de los 80, a veces con un sutil regusto progresivo que bien podría evocar el espíritu de formaciones como SAGA. Como tal, tienen todos los elementos que hacen del AOR lo que es, al menos del buen AOR; grandes estribillos pegadizos, fantásticas melodías vocales y grandes armonías. Pero en WORK OF ART no es solo la calidad instrumental y compositiva lo que los hace ser quien son y lo que les ha hecho llegar a dónde han llegado, sino que ellos tienen mucha emoción, mucho sentimiento, y lo despliegan en un AOR lleno de clase y elegancia, eso sí, siguiendo todos los estereotipos, incluso en cuanto a letras, a veces transmitiendo un particular buen rollo. En resumidas cuentas, WORK OF ART son reales, y además han creado un disco consistente de principio a fin, con pasionales voces y muchísimos momentos pegadizos, no solo en los estribillos, sino en los riffs. Realmente todas las canciones permanecerán en tu memoria durante tiempo, siendo difícil destacar alguna aunque, sin duda, entre las mejores de ellas está «Can’t Let Go», que une todos los elementos que forman WORK OF ART y un buen disco del estilo.

 

«Framework» es WORK OF ART, simple y llanamente. Y sus seguidores sabéis qué significa eso, pero para los que no seré breve: WORK OF ART es sinónimo de joya.

 

Frontiers Reords (2014)

Puntuación: 9/10

Tania Giménez

tania@queenosfsteel.com

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