GRAVE DIGGER – Return of the Reaper

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Supongo que haciendo un homenaje a aquel fantástico trabajo de 992 llamado «The Reaper», esta vez y bajo el título de «Return of the Reaper», la banda ha conseguido, después de tantos años, una unión perfecta entre discos. Si bien los últimos trabajos de GRAVE DIGGER no eran malos, sí se me hacían un poco cansinos, pero esta vez han ido directos a hacer una obra cómo ellos saben: con temas directos y estructura similar a lo que hacían a mediados de los 90.

El compacto consta de 12 cortes que no sobrepasan los 5 minutos, esto ya es una idea de que va a ser un álbum muy directo. Y así comienza el largo con una intro funeraria llamada como la obra, que da paso a «Hell Funeral»; un arranque Heavy Metal donde, inmediatamente, empiezan los coros y estribillos marca de la casa, con un ritmo frenético y pomposo. Le sigue «Wargod», también riffs marca de la casa. Una pista tan rocosa como salvaje. Coros épicos y guitarras speedicas. «Tattooed Rider» es una canción pistera, bailable, con mucha fuerza pero estribillos melódicos que entran a la primera. En cambio «Resurrection Day» tiene un sonido violento. Es agresiva, cercana al Power/Thrash de toda la vida. «Seaso of the Witch» es la típica canción que siempre hay en un plástico de GRAVE DIGGER: un medio tiempo con toques Doom, riffs pesados con coros hímnicos y mucha melancolía. Y «Road Rage Killer» es un homenaje al Metal tradicional. Un tema PRIEST en muchos momentos. Un tema de guitarras y coros rápidos.

Uno de los cortes que más me ha gustado es «Grave Desecrator»; tiene el punto de temas como «Knights of the Cross». Es un riff pesado constante con cambios a estribillos de toda la vida que hacen sentirte Heavy. Mientras que «Satan’s Host» es Speed Metal a la germanía, con toques a la NWOBHM, como solían hacer estos grupos en sus inicios. Guitarras súper heavies. Super temazo. El siguiente tema tiene el título en español, «El Día de los Muertos»; un medio tiempo la verdad, cansino, en el que el estribillo en castellano no era la mejor solución. Quizás lo mejor sea el solo de guitarra.

Y llegando al final tenemos «Death Smiles at All of Us». Vuelve la agresividad controlada en un tema old school a la Power Metal 80’s. Base impecable, estribillos épicos. Es esa canción con connotaciones antiguas. Esta vez tiene elementos árabes. Un tema Heavy seminarrado a la hora de cantar, con estribillos que marcan la diferencia. Y la cosa acaba con la balada llamada «Nothing to Believe»; esa típica balada con voz cruda típica de la banda y coros épicos.

 

Napalm Records (2014)

Puntuación: 8/10

Paco Gómez

paco@queensofsteel.com

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