Nada menos que 14 años han sido lo que los yanquis, padres prácticamente de su particular forma de ver el Sludge (que ha servido de inspiración a muchas bandas más jóvenes) EYEHATEGOD han tardado para lanzar su nuevo trabajo. Y es que en estos últimos el grupo ha pasado de todo, desde problemas personales de todo tipo, como adicciones o encarcelamientos, problemas naturales como la catástrofe del Katerina o hasta la triste e inesperada pérdida por causas naturales el año pasado de su batería, Joe LaCaze. Pero los de Nueva Orleans han sacado fuerzas, han vuelto a levantar y sacan toda una afirmación sónica bajo el título de, simplemente, «Eyehategod».

A partir de este punto, todo parece indicar que EYEHATEGOD comienzan una nueva etapa, pero no por ello tienen que sufrir ningún cambio musical, más bien al contrario, pero el título de la obra da muchas pistas, y quizás pudiera verse como un homenaje a Joe que, además, todas las pistas de batería de la placa las tocó el. Con esto me refiero que a esto es EYEHATEGOD en estado puro, por muchos años que hayan pasado. Son ellos en todos los sentidos, en todos los elementos que confirman la identidad EHG, del sonido, las letras hasta el ambiente y ánimo que transmiten. De esta forma, los de Louisiana siguen descargando como nadie riffs pesados, un terriblemente grave bajo, las vehementes voces de Mike Williams y letras nihilistas que sacan a la superficie toda tu mala leche. Todo ello lo descargan con ese Sludge tan particular, pesado y oscuro, pero a veces con velocidad casi Grind, también con pinceladas de Hardcore, Punk o Blues, mostrando unas dotes compositivas que están en su mejor forma. Dotes compositivas que percibimos en la variedad de tempos y pasajes de algunos de los temas, como en la rica «Framed to the Wall», con muchísimas pinceladas, de hecho en algunos pasajes incluso encontramos cierto regusto a Rock sureño, o momentos muy SABBATH, igual de pesados y oscuros, como en «Worthless Rescue». Bajos aplastantes y atronadores, siempre, en perfecta conjunción con un bajo que no deja de resonar. De hecho en ese aspecto ayuda mucho la producción, muy clara, dando mucha importancia a cada instrumento de forma individual, haciendo que brillen más.

 

«Eyehategod» representa muchos años de la historia del grupo en todos los aspectos, con una composición refinada donde fluyen y se fusionan mejor los toques de Doom, Stoner, Rock o Grind. Todo parece apuntar que este se convertirá en el disco definitivo del combo estadounidense.

 

Century Media (2014)

Puntuación: 9,5/10

Tania Giménez

tania@queensofsteel.com

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