BUZZ OSBORNE – This Machine Kills Artists
«This Machine Kills Artists» es el primer álbum en solitario del veterano Buzz Osborne, la eterna alma de MELVINS, que lleva sacando adelante desde hace ya más de 3 décadas. 3 décadas en las cual Buzzo ha dejado claro ser un artista en toda su extensión, creativo imparable, con el estandarte MELVINS siempre muy alto fuera de cualquier etiqueta o parámetro posible. Y un artista, igual de imaginativo, es lo que es en este primer trabajo en solitario.
Un trabajo en solitario de 17 temas acústicos, pero de muy alto voltaje. Así que, aunque se trate de un lanzamiento acústico, pero no esperéis algo Folk, o versiones de su banda. «This Machine…» es una bestia en sí misma. Una criatura nueva y diferente. Única en su especie. Siempre original. Como esas que solo Buzz sabe crear. Una criatura versátil, con algún toque de psicodelia y un enfoque mucho más pesado que el típico disco acústico. De hecho la intensidad equipara la labor que harían unas guitarras eléctricas, a veces con acordes hipnóticos. Es más, las guitarras, con riffs muy protagonistas, a veces frágiles y a veces densos, son las protagonista de la placa, pero también se ha puesto especial énfasis en la voz de Buzz, que suena prácticamente por encima de la instrumentación, pero sonando cristalino en todo momento. Las líneas vocales de Buzzo también descargan mucha variedad, en ocasiones incluso adaptándose a ese halo de misterio que crea con unas letras abiertas a interpretación. De hecho este proyecto comparte gran parte de la esencia MELVINS, pero descargada de una forma más directa en temas más cortos, digamos que con un enfoque rockero menos épico. De esta forma, aunque son 17 canciones, no hay sensación de repetitividad; resulta ameno, fresco, y absolutamente todas las pistas causan impacto.
«This Machine Kills Artists», como decía, es una criatura única, pero sería de estúpidos negar que no tiene algo de MELVINS, básicamente porque cualquier cosa que toca Buzz es inconfundible, siempre deja su huella, y eso es algo muy positivo, aunque cambiando la asfixiante distorsión por un sonido pesado aunque limpio creado por la pulcritud de unas guitarras acústicas que crean pasajes etéreos.
Ipecac Recordings (2014)
Puntuación: 8,5/10