CRÍTICA: MALOKARPATAN – Vertumnus Caesar
Este es el cuarto disco de esta banda que desconocía. Vienen de Eslovaquia, cantan en su idioma y me he llevado una agradable sorpresa, porque el disco es una pasada. En él se mezclan estilos casi de una manera orquestal sin ser orquesta, acoplando musicalmente con gusto y clase, además de ser conceptual acerca de la figura de Rodolfo II, alquimista t amante de las ciencias ocultas.
Entrando en el trabajo tenemos ocho temas que con «Na okraji priepaste otevíra sa hviezdny zámek», que es una intro de menos de dos minutos muy relajante, aletargada y sensible, la cual da paso a «Kočár postupuje temnomodrými dálavami na juhozápad» con un arranque metálico armonioso, veloz, pero sin abusar. Cuando, de pronto, una voz con un estilazo rasgado, a lo EXORCIST, marca la oscuridad por la que marcha la canción. Tenemos punteos neoclásicos, pero a lo IRON MAIDEN alternando con riffs más duros y densos y cambios con mucha ambientación heavy/gótica. Mientras, esa voz sigue metiéndose en tu cabeza de manera martilleante, aunque también se calma narrativamente en un pasaje final muy hipnótico.
Le sigue “Vertumnus Caesar”. Un principio arrollador muy black metálico, con esa voz frondosa y terrorífica, alternado con sintetizados, con órganos, de una manera que fluye en una oscuridad malévola y envolvente, además de unos pasajes de evidente progresivo clásico, unos coros pletóricos y un final de belleza sonora hipnotizante. En cambio, «Vovnútri chlácholivého útočišta kunstkamru» tiene un sonido más clásico, con unos riffs más estandarizados y unos punteos melódicos que surgen de las tinieblas. Vocalmente, EXORCIST total. No faltan esos pasajes psicodélico-atmosférico que embellece el corte por momentos. Aparte de unos solos finales con una profundidad y sentimiento brutal.
«Panstvo salamandrov jest v kavernách zeme» tiene una entrada muy a lo “Sirens” de SAVATAGE. Envolvente, brillante, con unos sonidos que construyen el camino por el que te vas a meter. La pista crece con los mismos acordes en un tono muy Folk del país. Con mucho clasicismo sinfónico. Lo cual sigue savatageando en el sonido para llegar a un punto de sonidos cósmicos muy logrado, con esa sensación de ir flotando por un agujero negro, acabando en otra dimensión con unos pequeños toques de batería.
Seguimos con «Maharal a Golem». EXORCIST total. Con un ritmo de riffs clásicos, pero con una funda cavernosa y oscura. Mientras que esa voz rasposa, desgarrada y tortuosa va metiendo cizaña a más no poder. Todo esto acompañado de pasajes con cierto Folk nativo, con unos coros oscuros y envolventes para llegar a otros más hipnóticos, suaves, con la voz narrando el terror que representa, sinuoso y malvado, con mucha ambientación. Para acabar estallando en tu cara. Del mismo modo le sigue «Mnohoraké útrapy milostpána Kelleyho», pero con un ápice más de brutalidad sonora, con punteos atractivos que surgen entre riffs pletóricos y constantes. Vocalmente en su línea; cavernosa y malvada, esta vez con esos “UGH” tan clásicos y, cómo no, esos cambios que dan una ambientación única, con unos coros brutales y un sonido pomposo y catedralicio.
Y acabamos con «I hle, tak zachádza imperiálna hviezda». Más de diez minutos de tema en un recorrido musico-visual acojonante. Comenzando por unos pasajes instrumentales llenos de envoltura hipnótica con algo de épica que se convierte en un medio tiempo fulgurante de riffs penetrantes. Al igual que la voz, muy dominante y diabólica, casi narrando el camino por donde suenan unas campanas fúnebres con una ambientación enorme. No faltan cabalgadas épicas muy clásicas acompañadas por punteos muy underground. Todo esto para acabar con otro pasaje de ritmos paisajistas algo caótico, pero encajado con dulzura y belleza apagándose lentamente.
En definitiva, un disco que te lleva más allá de la música y con el que se experimentan emociones alucinantes y oscuras.
Invictus Productions (2023)
Puntuación: 9/10
