CRÍTICA: THE BABOON SHOW – God Bless you All

No os podéis hacer idea de cuánto esperaba poder escuchar el nuevo disco de THE BABOON SHOW. Y es que no puedo decir que fuera el único grupo que escuché en 2022 y en lo que llevamos de 2023, pero sí el que escuché el 95% (como mínimo) del tiempo desde que lxs vi en directo en marzo. Así que ahora solo me falta contar los días hasta volver a verlxs cuando se pasen en marzo de nuevo por la península. Pero, vaya, a lo que vamos… Ya tenemos aquí “God Bless you All”, el décimo álbum de LA fábrica de himnos sueca.

Otro disco de una composición apabullante, de canciones bien hechas, guitarras de alto voltaje y estribillos pegadizos. Sin pasar por alto la voz de Cecilia, ¡que cómo ha mejorado con los años! Siempre igual de agresiva, pero cada vez más rota, más desgarrada y no tan gritada, también con más melodía y más registros, ya que aquí encontramos muchas voces melódicas y limpias, algunas tan rotas que por momentos rozan las guturales e incluso algunas partes narradas (como en el tema título, que es otro himno instantáneo, de esos a los que ya nos tienen acostumbradxs. Creo que es de los primeros himnos que saldrán de este lanzamiento). Todo en este disco es, como siempre, sencillo y directo, pero nadie compone como ellxs. Hacen que convertir cada canción en un himno parezca fácil. Por lo visto para ellxs es algo innato. Canciones bien hechas y, como siempre, letras con crítica social (también hay letras de la vida y de –o para- la fiesta).

Temas como “Made up my Mind”, que abre la placa, son de los más oscuros y pesados. Deja claro que THE BABOON SHOW son cada vez más contundentes, más sombríos e incluso lentxs, hasta más melódicxs, aunque la melodía siempre ha sido algo esencial en la banda. También pone de relieve que, posiblemente, este sea uno de sus trabajos más rocanroleros y menos Punk Rock (quizás el corte más punki sea “Midnight”). Hay AC/DC, sobre todo en las guitarras, hay HELLACOPTERS y hasta ZZ TOP (como podéis escuchar en los primeros acordes de “Revolution Avenue”), hay hasta ABBA (como en el medio tiempo “Gold”, que sorprende por el piano), aunque en realidad siempre han tenido esa mentalidad Pop. Hay más sorpresas, como la balada final, “Prisoners”, cantada por Håkan y, de nuevo, mucho protagonismo del piano.

Estos doce temas son –siento repetirme- auténticos himnos (en su mayoría) de riffs electrizantes. Para muestra un botón: “Rolling”. Rocanrol puro. Otra buena representación del disco, con su estructura original y unas voces muy al frente, en algunas ocasiones están premeditadamente más altas en la mezcla. Todo condimentado por unos coros a lo AC/DC (además de las guitarras). La estaba escuchando en un domingo aburrido, tirada en el sofá, en pijama, tomándome un té y sacando el puño durante el estribillo. Creo que eso lo dice todo.

Por otro lado, “Reason to go” me recuerda un poco a “War”, de su anterior “Radio Rebelde” en estructura y ambiente. Otro medio tiempo que precede a la versionaca “Have a Party with me”, original de EDDIE MEDUZA.

Si hay que sacar punta y buscar un pero, sería que el álbum puede hacerse un poco repetitivo, o algunas de las canciones en concreto, pero es un álbum de excelente, como siempre. Más temas lentos y más pesados (“Sands of Time” es buena prueba de ello, que además tiene un pasaje de guitarra precioso), pero sigue siendo crudo y agresivo. Básicamente, siguen siendo THE BABOON SHOW. Es toda una fiesta. Todo adrenalina. Parece que tienen perspectiva de directo, porque estas 12 canciones van a ser auténticos trallazos en vivo.

Es curioso cómo combinan un feeling casi melancólico con unas letras jodidas y unos ritmos alegres que te suben el ánimo. Sencillamente, nadie compone como ellxs. Y es mágica la forma en la que transmiten buen rollo y diversión dentro de esa sencillez que lxs hace cercanxs. Si esta sociedad en la que vivimos, que no nos da muchas esperanzas, tiene esta banda sonora, se hace todo más llevadero.

Kidnap Music / Filferro Records (2023)

Puntuación: 9/10