CRASHDIET – The Savage Playground
Un nuevo disco de CRASHDIET siempre es una gran noticia, y siempre va precedido de muchísima expectación, y rodeado de altas expectativas. El lanzamiento de su próximo álbum, «The Savage Playground», no es una excepción, a pesar de que sea su primera obra para la cual no han sufrido ningún cambio de formación. Quizás sea también uno de los atractivos de su nuevo compacto, ver si Simon Cruz ha aguantado el ritmo y no ha bajado el nivel, ver cómo sigue solidificándose en el grupo sueco y, sobretodo, aportando su propia esencia.
El compacto da el pistoletazo de salida con «Change the World», un tema que ya comienza a marcar el terreno a los 12 temas siguientes. Es un tema potente, contundente, directo… Vaya, 100% CRASHDÏET, reconocible desde el primer instante y con algo de los CRASHDIET de aquel ya lejano «Rest in Sleaze», que los convirtió en unos verdaderos abanderados del nuevo resurgir de la escena Sleaze/Glam. De todas formas, aunque sea una forma impecable de empezar este nuevo redondo (con la personalidad de la banda, interesante estructura con momentos instrumentales y un gran solo por parte del maestro Sweet, que cada vez parece sobresalir más, y merecidamente, como el gran guitarrista que es), muchas de las pistas que le siguen son verdaderos trallazos y posibles himnos imperecederos de los suecos. Ese es el caso del segundo corte, elegido como su primer single, «Cocaine Cowboys», con el necesario toque sureño al principio. Esta canción también muestra ese enfoque más moderno y pesado que tiene este nuevo álbum, así como más pinceladas hard rockeras, aunque las letras sean más Punk (como muestra tenemos «Anarchy», un corte que, por cierto, tiene algún que otro toque Heavy) que nunca (aunque es un espíritu que siempre ha impregnado los trabajos de CRASHDIET). Sin duda, buena elección elegir esta pista como primer single, puesto que es realmente pegadiza. Aunque ese es uno de los adjetivos que describiría a la perfección este disco ya que, además de ser tanto el más contundente y melódico, es también el más pegadizo. No cabe duda, los contrastes suman muchos puntos al redondo.
Como mencionaba antes, este disco esconde algún que otro toque Heavy, como en el medio tiempo «California» (nada qué ver con el tema de sus demos llamado «California White»). Por cierto, se trata de una canción con unas deliciosas melodías de guitarra (de hecho el sonido de las guitarras es algo que se reconoce en todo momento como CRASHDIET, han logrado crear su propio sonido guitarrero), especialmente al comienzo, además de unos grandes coros que emiten un feeling emotivo que no tiene precio. «Circus» es un tema cargado de adrenalina y que cargará las pilas a cualquiera desde el primer instante con una base rítmica atronadora, al igual que «Sin City», de nuevo puramente CRASHDIET en todo su esplendor y con un Simon que parece sentirse como en casa (impecable y versátil) en el seno de la banda escandinava. «Got a Reason» es una de las canciones más melódicas y elegantes, de esas que destilan clase y buen gusto por todos los poros. Un medio tiempo que, no por ello, pierde el sello de la casa y ese toque crudo que no puede faltar en ninguna de las composiciones de CRASHDIET. De hecho esta combinación es algo que siempre ha destacado en ellos, y en este nuevo lanzamiento parecen sacarle todo el provecho. «Drinkin’ without you» es una prueba de ello, con esa combinación entre un sonido cuidado y melódico con esa actitud Punk que jamás han escondido. Otra pista llena de pasión y energía. Y por ese mismo camino le sigue de cerca «Snakes in Paradise», aunque con un ritmo más pausado y un sonido más grave, además redondeado con un estribillo realmente pegadizo. Pero «Damaged Kid» sí es un auténtico torbellino de pasión y honestidad hecha música. El tema más contundente, denso y original del plástico, con un toque muy moderno pero sin perder en ningún momento sus raíces, su propia personalidad (la cual, por cierto, cada vez van perfilando todavía más, y haciéndola aún más propia). Apabullante estribillo.
Todo genial hasta ahora, exquisito, lleno de contrastes, de texturas y colores diferentes que hacen que el recorrido por esta placa sea algo realmente ameno, interesante y divertido. Pero parece que CRASHDIET esconden aún un as (o dos) bajo la manga, puesto que han guardado los dos verdaderos trallazos del compacto para el final. El primero es el emotivo «Excited», un fantástico medio tiempo que emociona nada más arrancar tras una breve intro. Maravillosa melodía, emoción a raudales, gancho, unas líneas vocales variadas pero que en todo momento encajan a la perfección con la música. Tiene eso de lo que carecen muchas canciones hoy en día, y eso se llama feeling, emoción… Como prefiráis, pero tiene sentimiento y garra, y llega y penetra en el oyente con una pasmosa facilidad. Y lo hace tanto por una ejecución soberbia como por una composición de sobresaliente. Finalmente llega el colofón y cierre del álbum con «Garden of Babylon», un tema con aire ochentero, aroma yanqui y mucha originalidad. Aquí los suecos incorporan elementos nuevos, como toques árabes a la guitarra y un ritmo que lo acompaña a la perfección, además de una melodía muy característica. Un corte con una variedad pasmosa, con una composición digna de envidiar. Épico, mezclando en el todos los nuevos elementos y las diversas influencias que mezclan en esta placa. Rotundamente, uno de los mejores temas de toda la historia de la banda, y lo han sabido utilizar para dejarnos con un gran sabor de boca. La guinda perfecta al pastel.
Impresionante este nuevo trabajo de CRASHDIET. Impresionante cómo se renuevan cada vez que lanzan un nuevo álbum pero sin perder su personalidad. Impresionante la forma en la que han creado su propio sonido, haciendo que resulten reconocibles desde que descargan la primera nota. Su mejor disco, sin duda, con sentimiento, garra, muy pegadizo y melódico a la par que contundente y cañero. Pero, sobretodo, con una enorme pasión y honestidad. La honestidad y pasión por lo que hacen, lo cual hace que todo resulte mejor, que fluya de forma natural, que suene sencillo a la par que fresco y directo, creando un gran impacto en el oyente. Todo resulta natural, sencillo y directo pero, al mismo tiempo, «The Savage Playground» es el álbum más sólido y compacto de la banda, más estudiado, con unas composiciones más elaboradas (con pequeñas intros e interludios, una gran importancia de las partes instrumentales y sacando el mejor provecho de todo por lo que son conocidos), llenas de cambios e interesantes giros que hacen la escucha más amena.
Tras tantos años siguiendo de cerca a CRASHDIET, no esperaba que un nuevo compacto suyo me sorprendiera tanto y tan gratamente. Lo cierto es que «Rest in Sleaze» era insuperable por un único elemento: la emoción. Con sus anteriores discos superaron su debut en cuanto a técnica, pero en este «The Savage Playground» no tan solo se han superado a nivel instrumental, vocal y compositivo, sino que han vuelto a recuperar esa emoción que creo todos sus seguidores echábamos de menos. «The Savage Playground» es la unión definitiva de lo que hace que CRASHDIET sea quienes son y, esperemos por mucho tiempo, serán.
Frontiers Records (2013)
Puntuación: 9/10
