CRÍTICA: SODOM – Tapping the Vein (reedición)
Si hay un disco de Sodom que le parte la cara a cualquiera, ese es Tapping the Vein. Treinta y dos años después, este álbum vuelve con una reedición brutal, que no solo remasteriza el sonido original sino que añade versiones alternativas y conciertos en vivo de su gira del ’92, así que, para cualquier Sodomaniac, es como tocar el cielo (o el infierno) con las manos. Este disco, entre Agent Orange y Persecution Mania, es uno de los favoritos de todes por esa mezcla de thrash y un toque death que, aunque nunca fue intencional, se siente salvaje.
Este fue el último álbum de Sodom con Chris Witchhunter a la batería, y su intensidad queda plasmada en cada golpe. Aquí, la banda no cedió ni un ápice a tendencias; mientras otros grupos iban suavizando el sonido, Sodom doblaba la apuesta con riffs pesados y un sonido crudo que rompía esquemas. Canciones como «Body Parts» o «The Crippler» son verdaderos martillazos, y ni hablar de «Skinned Alive» o «Hunting Season», donde Angelripper y Andy Brings se lucen con un muro de sonido y una energía que, según el propio Andy, fue pura hambre y juventud canalizada en thrash.
La reedición ofrece una versión remasterizada del álbum original y, para les más fanátiques, incluye un remix completo con tomas alternativas, que deja el sonido mucho más potente y definido. Como frikada adicional, el super deluxe pack tiene vinilos en formato «blood-filled» (literal, color sangre) y grabaciones de conciertos míticos de Sodom en Tokio, Düsseldorf y Colonia, con Witchhunter dándolo todo. La edición se agotó en nada, así que está claro que Tapping the Vein sigue teniendo un lugar especial para cualquier amante del metal extremo.
Al final, Tapping the Vein es un recordatorio de la época en que el thrash metal era pura furia y experimentación. Es una cápsula de energía cruda, de esas que, según Angelripper, nunca se crean con intención de ser “culto”; simplemente ocurre. Esta reedición es un viaje al pasado y una celebración de un momento en el que Sodom puso todas las cartas sobre la mesa, sin importar las modas.
Noise/BMG (2024)
Puntuación: 9/10