IN SOLITUDE – Sister
Pocas veces, muy pocas, había tenido tantas ganas de escuchar un álbum como el nuevo de IN SOLITUDE, especialmente tras presenciar su actuación en Uppsala en el concierto de lanzamiento del último álbum de WATAIN. De hecho, pocas veces me he sentido tan atraída, o he estado tan enganchada a una banda, despertando esa misma sensación que cuando empecé a escuchar Metal, descubriendo sensaciones nuevas. Conocía IN SOLITUDE, claro que sí, desde el primer álbum, pero a veces, cuando escribes en un webzine, no prestas a los grupos toda la atención que merecen, o a veces los escuchas como obligación, sin degustar realmente su música. Con los suecos me ha pasado lo mismo, a pesar de conocer sus dos trabajos de larga duración, fue hace pocos meses cuando empezaron a despertar en mí esta especie de obsesión. Una obsesión que me devuelve a mi infancia, a cuando conseguía con «trades» discos como «Don’t Break the Oath» o los «Abigail». De hecho a los de Uppsala siempre se les ha comparado con MERCYFUL FATE, pero os aseguro que en su nuevo «Sister», solidifican aún más su propia personalidad y se distinguen como una entidad propia.
El álbum abre con la intro acústica «He Comes», con cierto regusto a Gothic Rock, quizás sobretodo por la voz de Pelle, que resuena como un eco fantasmal integrado en el sonido, en la sombría atmósfera que siempre ha sido la dueña de sus creaciones musicales. Un tema que prepara el ambiente, marca el estado de ánimo y que, a su vez, se integra de forma natural en la segunda canción, «Death Knows Where», que prácticamente parece una continuación de la intro, siguiendo con una melodía similar pero acelerada y en eléctrico. Una pista donde las guitarras toman el rol primordial. Una canción más rockera que de costumbre, con una melodía más fácil y pegadiza de lo habitual en ellos. Aún así, una creación genial, emanando esa oscuridad y halo místico/espiritual que siempre ha rodeado a los suecos. Estribillo pegadizo y cambios de ritmo que no hacen otra cosa que realzar su ambiente, incluida una parte atmosférica/instrumental con aire espacial, incluso aroma PINK FLOYD.
«A Buried Sun» empieza con reminiscencia incluso cercana al Blues, un tempo medio/lento cautivador. Además contiene un bajo exquisito por parte de Gottfrid y una interpretación de Pelle verdaderamente única, que lo muestra más visceral y versátil que nunca, con unos registros muy graves acorde con ese sonoro bajo. Un título donde la atmósfera, una vez más, es lo primordial, realzándose con un outro al final del tema. Y también juegan un papel importante los momentos instrumentales.
De momento vemos un disco muy rockero, y eso se extiende hasta «Pallid Hands», de nuevo con cierto regusto Goth Rock a lo FIELDS OF NEPHILIM, aunque a medida que avanza se solidifican ligeramente sus cimientos de ese Heavy Metal tan tradicional, especialmente con unas guitarras muy clásicas en algunos instantes. Destacan especialmente los grandes coros, por no mencionar la elaborada y efectiva composición/estructura. De todas formas, a esta altura de su carrera musical es absurdo dudar de sus enormes dotes compositivas, de su gran creatividad. Poco a poco el disco va dejando de ser más rockero para convertirse en un disco 100% IN SOLITUDE, en ese compacto que todos sus seguidores esperaban. Poco a poco el disco va convirtiéndose en los IN SOLITUDE heavies que todos conocemos, por no decir que, a medida que avanza el largo, mejora todavía más. Uno de los momentos en los que notamos ese paso es con «Lavender», que solo hay un adjetivo para definirla: es única. Melodía única, un Pelle todavía más pasional si cabe, entregado y honesto, dejándose la garganta y el corazón en uno de los temas más rugosos, misteriosos y siniestro del disco. Personalidad a raudales. Es tan única que incluso los riffs de guitarra imprimen dosis de horror y una áurea muy «vintage».
Y llega el momento de «Sister», el primer single del lanzamiento. Tengo que reconocer que la primera vez que lo escuché fue una decepción. En un principio creí que le faltaba fuerza, garra y oscuridad, que era demasiado rockero, facilón y simple, poco elaborado y sin trasfondo, si si habitual envolvente ambiente sombrío y sin esa honestidad tan pasional. Pero ahora, tras escucharla innumerables veces y tras despertarme distintas emociones combinadas y encontrar nuevos elementos en ella, debo decir que se trata de una de esas pistas que crece con las escuchas. Quizás es que se tena que escuchar en el contexto del álbum, (ya sabéis que en IN SOLITUDE cada elemento va unido, formando parte de un concepto), formando parte de un todo. Es increíble lo bien que se integra y fluye con el resto de temas, cómo da la sensación de que todo, hasta el orden de las canciones, tiene un significado concreto, un motivo. Y «Sister» no es una excepción, y es la mejor prueba de que estamos ante un disco completo, no simplemente una colección de temas individuales (aunque cada uno de ellos tenga su propia identidad). «Sister» demuestra, una vez más, lo pasional y fuertemente emocional que es este trabajo. También es apabullante la forma en que una canción con tanta melodía, tan pegadizo y, a primera vista, tan fácil en todos los aspectos, es una de las más siniestras del redondo, precisamente por jugar con esos elementos opuestos, incluso con los coros. Elementos opuestos que dan fruto a una obra extrema y llena de contrastes, lo cual muestra que ni la composición es tan aleatoria o fácil como podría parecer en un primer momento. Al contrario de lo que parece a la primera escucha, se trata de una pista con fuerza y garra, tan solo hay que escucharla varias veces para percatarse de ello, de que las apariencias engaña. O quizás, simplemente, hay que escucharla con detenimiento.
Llega «Horses in the Ground», dando comienzo con un prominente bajo. Y aquí por fin, y por primera vez, nos encontramos de frente con los IN SOLITUDE que todos conocemos y con los que esperábamos reencontrarnos: puro Heavy Metal tradicional con su esencia única. Un tema que bien podría haber formado parte de su debut. Enorme sonido de guitarra. Y como broche final, «Inmost Nigredo», un monstruo épico de más de 8 minutos que define todo el disco y todo lo qué es IN SOLITUDE. Empieza con una intro acústica. Posiblemente sea la canción más envolvente y cautivadora, hipnótica (de nuevo, especialmente gracias a la voz de Pelle y su facilidad de hacerte viajar y esa gran comunión que crea con las guitarras, que en ciertos momentos parecen formar parte de una marcha fúnebre). Una canción muy densa y lenta, con partes incluso cercanas al Heavy/Doom. Mención especial a los últimos riffs de guitarra, realmente gélidos, que parecen inspirados por el Black Metal.
Todas las bandas que se rigen, guían y fluyen con su espiritualidad llevan su música, su arte, su creación, a terrenos insospechados, exploran como artistas y como individuos, llevando su creación a otro plano que el simple musical. Eso hacen IN SOLITUDE, por eso no dejan de explorar, de añadir nuevos elementos y deshacerse de algunos de su pasado. Por ejemplo, ya no se pueden comparar tanto con MERCYFUL FATE, no por el sonido, sino por la emoción, los ambientes. Tampoco encontramos esos toques tan MAIDEN, ni hay ritmos galopantes, ni tan solo esas segundas voces guturales. Incluso la producción resulta más orgánica y rugosa que nunca, dándole a todo el álbum un sonido todavía más clásico, mientras que la composición hace que un disco elaborado resulte honesto y fácil, y eso solo se consigue con unas grandes dotes.
IN SOLITUDE en «Sister» se reafirman más que nunca como una identidad propia, única, irrepetible. Como una banda que se guía tan solo por su interior para explorar nuevos territorios, para romper barreras. Son los de siempre mirando en nuevas direcciones. Sus cimientos son los mismos, y cada vez se perfilan más sobre ellos. Y lo digo sin titubeos. Estamos ante una de las mejores bandas de Heavy Metal, por lo menos, de la última década.
«Sister» es transformación, crecimiento. «Sister» es un viaje, una experiencia sónica. «Sister» es pasión y honestidad. Los IN SOLITUDE más viscerales.
Metal Blade Records (2013)
Puntuación: 9/10
