BEARDFISH – The Void
Desde su formación en 2001 el cuarteto sueco BEARDFISH ha conseguido labrarse un sólido nombre y puesto en la escena progresiva, especialmente influenciada por el Rock de los 70 y por formaciones como YES o KING CRIMSON. De hecho desde su creación no han perdido ni el tiempo ni las ganas, y han aprovechado cada segundo con una imparable en actividad. Una actividad que marcan en este 2012 con su séptimo trabajo, titulado «The Void».
Si por algo se han caracterizado siempre BEARDFISH es porque con ninguna de sus obras han dejado de evolucionar, de añadir nuevos aromas a sus creaciones y de ir siempre un paso más adelante, incorporando nuevas sorpresas para los oyentes. Su nuevo «The Void» no es una excepción, y con este compacto endurecen su sonido para convertirse prácticamente en una formación de Metal progresivo, en ocasiones incluso con cierto toque a lo DREAM THEATER. De todas formas, cada una de las 11 canciones que forman este nuevo es un mundo y ofrecen algo distinto y nuevo al oyente, creando así algo ameno y tan dinámico como siempre.
Aunque «The Void» posiblemente sea el disco más duro de los suecos hasta la fecha, mantienen por encima de todo ese áurea de los 70 que les ha acompañado desde el principio, tanto en sonido como en estructuras; desde unos grandes teclados (que son uno de los protagonistas y mejores elementos de la obra en todo momento, aportando impecables efecto e incluso ciertos toques épicos) pasando por la frágil voz (aunque en «This Matter of Mine» incluso nos encontramos con unas pocas líneas guturales) o esas secciones reminiscentes del Jazz. Tampoco se olvidan de las grandes melodías, y las elaboran cuidadosamente en esos temas más metálicos (como puede ser el caso de «Voluntary Slavery», también con un fuerte groove). Por otro lado, las distintas formas de utilizar un mismo instrumento es exquisita, pasando por las guitarras, capaces de desprender un sonido realmente sutil a momentos muy pesados, exactamente igual que el bajo o la batería, sin dejar de descargar continuos cambios de ritmo y creando un interesante contraste cuando se confunde con un órgano Hammond que no podría faltar en cualquier obra del género tan fundada sobre la década de los 70.
De nuevo BEARDFISH dejan bien claro que con sus discos crean magia y no solo música. «The Void» es su álbum más duro, pero no pierden su esencia y mucho menos la garra, logrando obtener algo tan complejo como seductor y entretenido, y no solo para los amantes del Rock progresivo o de la música de los 80. Siguen evolucionando y no parecen querer dejar de hacerlo.
Inside Out (2012)
Puntuación: 8,5/10
