CRÓNICAS: LEYENDAS DEL ROCK – SÁBADO – Cierre con aires Folk, cuernos, cerveza y círculos juglares.
Buenos días Sábado!
Despertamos con esa mezcla de agotamiento y tristeza de saber que hoy es el último día de conciertos, de estar con aquella gente que solo ves una vez al año y aunque el acampar no sea lo más cómodo del mundo, es una experiencia que para aquellos un poco aventureros, gusta vivir algunas veces en la vida, y reconozco que año tras año, empiezo a montármelo cada vez mejor.
Hoy hace mucho, mucho calor, y hay un debate interno entre ir a la plaza del pueblo a ver tocar a Saurom en acústico, o ir a pasar la mañana como cada día en las piscinas.
Pero como Saurom son mis favoritos, valen más que una mañana en la piscina, así que toca visitar el enjambrado de tuberías de agua gélida que hay por duchas y ponernos en marcha.
Un paseíto bajo el sol abrasador gps en mano, ya que no sabía bien donde estaba la plaza del pueblo, y con el encanto que tiene este pueblito, doy con ella tras un arco y un pasillito pequeño en medio de la calle. El lugar igual que el pueblo, también tiene mucho encanto. La plaza es pequeñita y tiene un escenario entarimado de buena dimensión. La gente se va agrupando bajo los toldos de algunos bares que hay y la poca sombra que ofrece la fachada del edificio. Si miras al cielo se ve un campanario y la punta del castillo del pueblo.
Unos minutos más tarde de las doce sube la banda al escenario a ofrecernos un largo repertorio acústico de sus canciones con las que giran fuera de “El Pajaro Fantasma”, diría más bien que rescataron el setlist de “La Caja de Música” así que pudimos escuchar las canciones, que además supieron animar muy bien con dos animadores, como El Queso Rodante donde sacaron una cuerda bien larga e hicieron que el público se pusieran a saltar a la comba; El Círculo Juglar, donde obviamente no pudo faltar el circulo, al que Miguel se atrevió incluso a meterse dentro y disfrutarlo. Dracum Nocte, donde ahora fueron tres animadores los que salieron, uno con una cabeza de dragón a pasear entre la gente y otros dos se pusieron con pistolas de agua sobre los altavoces a refrescar al público que agradecidamente recibieron los chorros de agua, pero también hubo espacio para los momentos emotivos, donde Joselito dedicaba una canción a una nueva estrella en el cielo.
La cercanía de la banda con el público en este formato, hizo que Miguel, que estaba imparable, también se lanzara a tocar el violín.
Algo más de una hora de auténtica diversión y emoción juglar, pues con esta banda solo puedes reír o llorar de emoción al mismo tiempo, disfrutando de los grandes músicos que son.
Al acabar fueron todos muy cercanos y se mantuvieron por la plaza firmando y haciéndose fotos con sus fans.
Un buen rato más tarde, tocó hacer el paseo de vuelta hasta el camping, hacerme algo de comer y volver a pasar por la ducha para sofocar las altas temperaturas.
En el día de hoy es un poco más puntero el genero folk-metal, y parece que también están tomando como costumbre traer a bandas con alguna excentricidad.
Para empezar, Equilibrium, que mezclan el folk con el black metal abrían la tarde en el escenario Jesús de la Rosa, y con su nuevo single Shelter. La banda alemana hizo un concierto limpio y contundente, y teniendo en cuenta que aún estamos todos un poco adormilados a estas horas por el calor y el cansancio de tantos días acumulado, disfrutamos de sus cincuenta minutos y hasta podría decir, que al ser la primera vez que veía y oía a esta banda, se me hicieron bastante cortos, y me hubiera gustado poder disfrutar de un buen rato más de ellos.
Acto seguido, en el escenario contiguo, y muy rápido (se agradece que los tiempos entre banda se hicieran más cortos, o me pareció que se hicieran más cortos) salían a escenario Tyr. La banda de Copenhaque que ya van camino de los treinta años de carrera musical, comenzaron su show con By the Sword in my Hand, y sacaron a relucir todos los temas épicos sobre dragones, espadas, martillos, hachas y vikingos varios aprovechando su último lanzamiento, haciendo sonar los temas Hammered o Dragons Never Die.
Con ellos pudimos unirnos a los pogo y remar y sobretodo disfrutar muchísimo de este concierto y de la energía que transmitían sobre las tablas.
Dando comienzo la nueva banda, esta vez es el turno de Wind Rose, que solo con verles ataviados con sus trajes, nos daba calor y casi un patatús. Sobretodo, el de su cantante, Francesco Cavalieri, que iba ataviado con casco casi integran además de la túnica con pelliza y botas altas.
Sus compañeros de banda, lucían simplemente unas túnicas con un bonito color azul eléctrico, que sin duda hacían su actuación más vistosa.
Ahora que los veía en acción, siendo la primera vez que sabía de ellos, entendí el por qué entre el público asistente habían grupos de gente con gorritos de enanitos, otros con picos y muchos martillos.
Esta banda salida de la Toscana hacen música folk y power metal, pero sus letras están inspiradas en las historias de J.R.R Tolkien, y sobretodo en los Enanos, donde ellos mismos se catalogan como género Dwarf Metal.
Fueron muy divertidos, y nos brindaron el tema Diggy Diggy Hole, donde todo el público hacía el gesto de cavar, y no solo eso, sino que era en una versión techno, así que no faltaron los bailes y los saltos entre los asistentes.
Stratovarius vienen para recordarnos que el heavy – power metal clásico no está muerto. Que pese a los años que vayan pasando las antiguas y las nuevas generaciones siguen apoyando a la banda finlandesa.
Un pequeño recorrido con grandes Hits de toda su trayectoria nos pusieron a saltar y a cantar, y a recordar aquellos años tan atrás cuando éramos unos chavales y empezábamos a seguirlos, viéndolos sacar discos y manteniendo sus temazos como Paradise, la no tan antigua, Eagleheart hasta la más famosa que a todos nos pone los pelitos de punta con su intro a piano barroco, Black Diamond. ¿podemos decir que el disco Visions es la obra maestra y los temas más atractivos para los conciertos?
La formación que tiene ahora la banda y que sigue siendo la misma que pudimos ver el año pasado en el festival Ripollet Rock, cada vez se ve mas comoda y compenetrada sobre el escenario, haciendo así que todo el tiempo de concierto fuera agradecido para su público.
Y siguiendo los clásicos del Heavy Metal, desde el otro lado del charco nos traen a los míticos Rata Blanca.
¿quién no ha escuchado en algún momento dado algún tema de ellos, aunque no seas fan?. En cualquier bar musical que se precie en España, en algún momento de la tarde-noche los escucharás, y seguro con temas tan conocidos como los que nos trajeron en el repertorio del Leyendas. Abrieron la tarde con Diario de una Sombra, disfrutamos de Mujer Amante y como no podía ser de otra manera, acabaron su concierto con La Leyenda del Hada y el Mago. La banda anunció que próximamente los tendríamos girando por algunas ciudades españolas cosa que hizo al público ponerse muy contento.
En el tiempo de duración del concierto de Rata Blanca, hice una pequeña escapada al escenario New Rock, que las grandes bandas hacen que lo tengamos un poquito olvidado, pero es que había una banda algo misteriosa digna de poder ver. La banda en cuestión es un dúo, vienen de Occitania, Francia, y se llaman Eihwar. Fueron los invitados a tocar en la fiesta de presentación que se organizó en Villena, de los festivales venideros como el Leyendas y el Rabolagartija. Un concierto que se hizo en mayo y que fue totalmente gratuito.
Este dúo está formado por Asrunn, escondida bajo medio cráneo animal y con la cara pintada de negro, que se encarga de las voces, y la percusión tradicional, como pudimos ver aquí en el directo, llevaba consigo un gran pandero que toca muy grácilmente al son de la música, y Mark, aún más misterioso bajo un casco vikingo y unos ropajes de guerrero, a los coros y voces, a la batería y los demás sonidos electrónicos procedentes de su teclado.
Se lanzaron en este mismo año con un álbum de diez temas llamado Viking War Trance.
Su música es una mezcla de música tradicional vikinga, de techo, y de poderosos sonidos ambientales que te trasladan a los bosques nórdicos y casi la recreación de los sacrificio a los dioses para ganar la batalla y atravesar las puertas del Valhalla.
Encandilaron al público que dejaba mover su cuerpo inconscientemente de un lado a otro disfrutando de su directo.
Ahora están de gira europea presentando su disco, y si os gusta este género musical y tenéis la oportunidad de poder verlos, os los recomiendo totalmente.
¡Y por fin llegó el momento más esperado de todo el festival!
Dos años de espera, ningún concierto por tierras españolas o catalanas para poder disfrutar de ellos, sino que nos tienen con los dientes largos y por lo que vale la pena recorrer los kilómetros que hagan falta por tal de disfrutar de ellos en directo, y casi diría, que aún mejor en formato festival, pues el ambiente aún es más divertido.
Patitos por todos lados, miraras donde miraras. Camisas, gorritos, disfraces hinchables, hasta un puesto de las tiendecitas vendía patitos con una pinza que podías engancharte donde quisieras, en la gorra,en el pelo, en la ropa… ¿que podía significar tanto patito de goma junto?
Que los escoceses de Peth venían a liarla con su Pirate Metal Music. Y vamos que si la liaron!!
Alestorm aterrizaban con su barco pirata para poner patas arriba el festival, literalmente hablando…
Keelhauled fue la primera canción que sacaron a relucir para la calurosa noche del sábado y mientras que los fotógrafos nos dedicábamos a intentar sacar los mejores planos con las pocas luces que nos dejaban, el público iba entrando poco a poco en calor, pero no pasó mucho mas tiempo del tercer tema que es cuando nosotros salimos para que se armara gorda. Los mospits y los circles pitts ya estaban a la orden del día, y a la que vimos a la primera persona haciendo crowdsurfing no dudamos alguna compañera de foso y una servidora en lanzarnos también al mogollón a pedir que nos alzaran, y no una ni dos, sino mínimo fueron tres veces las que nos dejábamos caer ante el foso desde el público y repetiamos como muchísima otra gente del foso que ya empezaba a reconocer tras una y otra vez saliendo por donde acabábamos de salir nosotras también.
Tocaron mis favoritas, Mexico, Hangover, Zombies Ate My Pirate Ship, la algo más calmada y que nos dio un tiempo de respiro de tanta emoción y carrera, Tortuga, la que más nos hace bailar P.A.R.T.Y. y su Bis formado por Drink, Rum y Fucked with an Anchor, que llenaron la primera fila del escenario con un gran FUCK YOU inflable de letras verdes. Con ellos también pudimos como no, remar, que sería de unos piratas sin sus grumetes y gozarlo, sobretodo, disfrutarlos muchísimo, al máximo, y más sabiendo que era nuestro antepenúltimo concierto del dia y de la edición del 2024. En acabar, Chris, su cantante, se tiró al público que fueron pasándolo de mano en mano por todo el recinto, mientras él, dedo marcando el camino hacia la barra, dirigía a ese grupo de personas que finalmente lo agarraron y se lo llevaron en volandas hasta llegar a su destino, y tras dejarlo en el suelo, se deshicieron en vítores y aplausos.
Y si Alestorm no nos habían hecho cantar y saltar lo suficiente, llegó el segundo plato fuerte de la noche y también una de las bandas por las que me encontraba allí. La banda bandera y banda sonora de mi vida. Los gaditanos Saurom, llenando el escenario de fuego y de gente, presentaban ante todo el Leyendas su nuevo disco y gira de El Pájaro Fantasma, y ¡de qué manera!
Abrían el concierto con toda una banda de voces femeninas y masculinas a cargo del coro El Batallón de Mordor que contaba con casi una treintena de personas vestidas de negro, con una túnica con capucha también negra y con la cara pintada como esqueletos , ocupando toda la parte central del escenario sobre un entarimado.
Junto a Migue, la voz femenina de Elizabeth Amoedo, al violín acompañó la maravillosa Jezabel Martinez, a las gaitas, la banda de Wyrdamur, que amenizaron también varios de sus temas. Un sin fin de grandes músicos y animadores que hacían de cada canción una auténtica fiesta.
Momentazo cuando aparecen sobre el escenario Ramón Lage e Isra Ramos a cantar No seré Yo, también de su último disco El Pájaro Fantasma. Se nos pusieron los pelos de punta con Cuando Nadie nos ve, y ya casi nos quedamos sin ellos con La Llorona, menudo momentazo por favor, de potencial musical y de potencial vocal. Una versión sublime de esta canción que todos conocemos, originaria de tradición popular, aunque la conocemos más en voz de Chavela Vargas y protagonizada por los personajes de la película Coco de Pixar-Disney.
Con El Carnaval del Diablo no faltaron los disfraces, los zancudos, los malabares y el fuego, bailarinas y muchos elementos que se unían a la banda en el gran escenario. Prendieron el Leyendas con Fuego, y subieron la temperatura con chorros y chorros de fuego que salían de todos lados del escenario, junto con pirotécnica y las bailarinas con abanicos con una hermosa tela el tonos amarillos y rojos que parecía que por allá donde bailaban iban prendidas en hermosas llamas.
No pudo faltar El Círculo Jugar, donde la animadora que ya pudimos ver por la mañana en la plaza del pueblo, Andrea Mediana, ataviada con un látigo de luz led, abría espacio en el centro del público para dar inicio al gran círculo del que muchos formamos parte. Con La Taberna del Poney Pisador ponían fin a este pedazo de concierto, que no me importaría repetir una y otra vez, pues ver a Saurom es olvidarte de todo, disfrutar sin miramientos y cantar y saltar sin importar que lleves ya cuatro días de festival a la espalda a y te duelan hasta las pestañas de tantas horas sin descansar bien.
Y aunque al acabar, la última banda que tocaban era El Reno Renardo, con ellos cerramos una nueva edición del Leyendas y empezamos a restar los días en una cuenta atrás hasta el próximo agosto del 2025.
Risas, muchas, muchas risas, bailes, cánticos, mucho surfing, muchas fotos, muchas horas, y grandes momentos con grandes personas, que cargamos en la mochila de los recuerdos y que abriremos de vez en cuando para añorar los cuatro grandes días que hemos pasado en este maravilloso festival como es el Leyendas.
Un año más, agradecemos a la organización, al Staff, al equipo de seguridad y a este medio, la oportunidad de poder formar parte de una nueva edición del festival.
¡Hasta el próximo Leyendas del Rock 2025!