CRÓNICA: LEYENDAS DEL ROCK (Viernes) – Entre dragones y diosas. El punto ‘épico’ del festival
Despierta un nuevo día en el camping del Leyendas y como no se aguanta el calor dentro de la tienda, me coloco el bikini y me voy chino chano dando un paseíto hacia la piscina, que hoy ya se aprecia un poco mas llena de gente y las zonas de sombra, como patata caliente, van rotando de personal, ya que si en algún lado se puede aguantar este sol justiciero, es dentro del agua o en la sombra.
Corriendo como para no variar ( en cada año, siempre hay un día que no das para más y llegas ya con el concierto un poco empezado), llego a Elvenking justo cuando ya está sonando Pagan Revolution.
Tengo especial interés en quedarme toda la actuación pues Elvenking fue una de las primeras bandas de «heavy» y folk que escuché con apenas 12 o 13 años.
Aunque ya después de tantos años suenan mas frescos y mas alejados del folk tradicional y básico de los 2000 creando su propio sonido original, alejado de todas las bandas folkies que suenan igual.
Hay que otorgar méritos a que cada una de las bandas que están pasando por el festival suenan muy propias. ¿que me refiero a esto? que cuando las oyes sonar no dices «esta canción suena a X’s canción de X’s banda, e incluso que entre cada uno de los temas que tocan, suenan diferentes.
Pasamos al escenario principal cuando ya la sombra llega a más de medio recinto y me topo con un nuevo descubrimiento musical en el día de hoy.
Novelists, un poco al estilo Jinger, metalcore y progresivo, con Camille a la voz entre melódica y desgarradora. Tímidos, los fans y público, que quizás estén conociéndolos ahora, se arrojan a hacer un wall of death comandado por la frontwoman, y hasta algunos pogos. Me está faltando mucho ver los crowd surfings este año entre el público, que parece que están entre adormecidos y descolocados. No se porque pero este año se respira un aire demasiado manso entre el público. Quizás hay demasiadas bandas desconocidas y el público está atento para ver que tal son y no están tanto por el alocamiento y la fiesta. Aún así algún atrevido hay entre la veintena de personas que se dedican a hacer circle pits o moshpits.
Siempre a primera hora a las bandas les cuesta un poco hacer entrar en calor a su público, pero a los franceses no les cuesta demasiado metérselos en el bolsillo, y es que con la selección de canciones y sus melodías es imposible no ponerte, como mínimo, a mover la cabeza.
Pudieron presentarnos temas de su último disco CODA, como Say My Name, Coda y All for Nothing, y acabaron su concierto por todo lo alto Turn it Up. Muy buen concierto para ser los segundos de la tarde donde dejaron el listón muy alto para el resto del día.
Tenía las esperanzas puestas en la actuación de Van Canto y las expectativas muy altas, pues una banda con 20 años de trayectoria, y que escuchándolos en casa no están nada mal, los primeros temas han costado un poquito de encajar, las voces andaban un poco desafinadas y poco compactadas y quizás no han empezado con los mejores temas ni con la potencia que esperaba. Aún así, a medida que va pasando el concierto, consiguen triunfar cantando por Nightwish, Wishmaster y por Iron Maiden, Fear of the Dark. Una vez ubicada entre el público el sonido si se notaba mejorado y costaba darse cuenta de que la banda canta a capela acompañándose solo con la batería.
Impactante el éxito de Batlle Beast, aunque solo son las 20h de la tarde parece que sean ellos los cabezas de cartel del día de hoy, pues tienen una increíble masa de publico que está cantando y saltando cada una de las canciones y vitoreándolos desde que han tocado las tablas del escenario.
Aún no los había podido ver en directo y esto si que es un festival con todas las letras. Ahora si que todo el público está volcado con la banda y mires donde mires hay gente disfrutando de lo que están viendo.
No les hace falta ni escenografía pues ellos mismos y sobre todo Noora lo llenan completamente.
Dieron el pistoletazo de salida con Straight to the Heart y no bajaron el nivel musical en ningún momento. Pudimos ver riffs de guitarra en los que se llevaban toda la atención del público sus músicos Joona Björkroth, y Juuso Soinio, donde el teclista Jane Björkroth abandona la imagen del teclado parado y permanecer tocando aburrido tras este, y lleva un keytar, jugando así tambíen con el resto de componentes de la banda sobre el escenario. Y Noora, de verdad, no se puede ser más DIVA. Increíble, enérgica. Su voz te pone los pelos de punta y te carga las pilas. Para mi, el concierto del día y otro imperdible en sus próximos conciertos a los que intentaré por todos los medios poder ir a verlos.
Nos recuerdan además que estarán teloneando a Helloween en su 40º aniversario, solo que en caso de España, solo visitarán la ciudad Madrileña como concierto único, aunque como ya anunciaron en las sorpresas que no tenian preparados la organización del Leyendas del Rock cada dia a las 20h, podremos ver a los de la calabaza en la próxima edición como cabezas de cartel.
Pasamos a Feuerschwanz y que podemos decir… no, no os estáis volviendo locos, aquí también está Ben Metzner, aunque esta vez está como co-cantante junto a Peter Henrici. Esta banda es pura energía, saben poner al público del revés, y solo les hacen falta cuatro canciones, cuando suena «Knightclub» para empezar el desmadre.
El público ya no puede parar quieto, se forman pogos, circles pitts, y porque no decir, que la compañera de otro medio, Lucia y yo, que andamos buscando que se genere movimiento y se cree el centro de la tormenta, somos las primeras en abrir la veda del crowd surfing, aunque el público aún esta un poco verde y en el primer intento no consigo llegar hasta el foso, y los chicos se dedican a acompañarte desde el principio en lugar de dejarte ir, porque además hay muchos claros y el tortazo hacia el suelo está predestinado. ( por suerte todo fue bien, y a la segunda conseguí llegar jaja)
Visualmente son llamativos con sus trajes de armaduras, pinturas de guerreros pero sin exagerar, llevan dos bailarinas que interpretan los temas con sus danzas cual guerreras, con hachas y banderas que ondean en coreografía.
Desgraciadamente, a los pocos minutos de su directo, en el New Rock Stage están por empezar El Altar del Holocausto, y es pecado faltar a su homilía.
Me sorprende cuando llego que están sobre el escenario sin sus hábitos, cuando pensaba que ya habían empezado, resulta que están probando el sonido, y también me desilusiona, pues si algo envuelve a este grupo es la incógnita de no saber quien se esconde bajo los habitos.
Ya desde por la tarde no se que clase de problemas están teniendo en este escenario con el sonido, pero hace que las bandas comiencen sus conciertos con retraso y en este caso, tenemos que esperar más de 10 minutos a que hagan los últimos ajustes y que empiecen.
También me sorprende la poquita gente que hay en el público, cuando creo que a esta banda deberían darles el beneficio de tocar en uno de los escenarios principales y que el público los pueda conocer y disfrutar de su música como merecen.
15 minutos mas tarde de la hora programada salen de nuevo al escenario, ahora si, con sus túnicas blancas impolutas puestas y la cara tapada y comienzan a hacer magia con sus manos y sus instrumentos.
Tras la intro comienzan con El Silencio de un gesto, los últimos Eps que han visto la luz en 2024, para seguir con Act II – Resvrrectionem y seguir con Caridad.
Con todo el pesar, tengo que abandonar a la banda que me ha incitado a venir este año a esta edición, y aunque bajo literalmente corriendo a hacer las fotos de rigor a los cabeza de cartel, Within Temptation, al acabar los tres primeros temas y querer volver al escenario New Rock, El Altar del Holocausto han acabado ya su actuación, a la hora establecida, así que además el retraso se ha visto afectado en la duración del concierto.
La marabunta que había aprovechado el parón de los alemanes para ir a verlos ya vuelven a estar de bajada para asistir al gran concierto de la noche.
La banda de los paises bajos empezaba su concierto con We Go To War, y Sharon Den Adel salía ataviada con una bandera española a forma de vestido y una mascara parecidas a las que podríamos ver en operas o teatro al escenario. Escenario además, que evoca un antiguo anfiteatro con unas imponentes columnas a derecha e izquierda.
Durante todo el concierto se vio una especial sensibilidad, y muchos mensajes, como que Sharon llevara pintada la bandera de Ucrania en su brazo o incluso el momento que salío ondeando dicha bandera mientras interpretaban «Stand My Ground».
El repertorio de la noche fue versátil y equilibrado, donde sonaron desde los temas más agresivos como Wireless, al más melódico, Shot in the Dark. La elegancia, fuerza vocal e interacción con el público, hacen de Sharon y de Within Temptation consolidadores de su estatus como uno de los referentes del metal sinfónico.
De nuevo la presencia de la banda nacional se impone como cierre de la jornada del Viernes, primeramente le toca a los míticos Tierra Santa. Ellos si son Leyenda y arremolinan alrededor del escenario todavía a un buen puñado de seguidores.
Entre su repertorio están los temas de siempre, Alas de Fuego, La Leyenda del Holandés Errante, Indomable, Drácula, Legendario, y su cierre épico con La Canción del Pirata. No se si varió mucho su repertorio de la última vez que los vimos, pero sin estos temas no serían Tierra Santa y apuestan a lo seguro para llegarnos al corazón y abrir el baúl de los recuerdos.
Y para acabar, y aunque con un montón de problemas de sonido, Celtian nos llevó a su mundo de hadas, dando inicio al concierto con La Lira Encantada. Sonaron también las más míticas de ellos, El Hijo de Ayer, Niahm, y con la compañía de Rosalia Sairem, cerraron la noche con En Tierra de Hadas.
ELVENKING









NOVELISTS




















VAN CANTO











BATTLE BEAST

































FEUERSCHWANZ




























EL ALTAR DEL HOLOCAUSTO





WITHIN TEMPTATION




















TIERRA SANTA










CELTIAN


















