Nos encontramos ante el último trabajo de Regresión, una más que banda consolidada en la escena nacional metalera. Un exponente sólido del hard rock y el heavy en nuestro país que cuenta con un nutrido grupo de fieles seguidores.

Se trata de un trabajo sencillo y directo, sin mucha complicación en su composición. Heavy rock con un toque actual. Pese a ello, se muestran aventureros y se alejan en varias ocasiones de su zona de confort.

 

 
Los aullidos de un lobo dan paso a su primer tema, “gritos en la oscuridad” , donde presentan una versión humanizada y un tanto hiperbólica del lobo, propia de las leyendas de terror de décadas atrás. En su conjunto es un tema ágil, directo y bailable que funciona bien como comienzo de un CD, porque activa de improviso con un riff trepidante, un enérgico doble bombo y un estribillo pegadizo. “Puño de hierro” es un homenaje a “Lemmy Kilmister” y habla  de “sexo, drogas, motos y rock and roll”, y hace gala del espíritu malote que caracteriza a los músicos y fans de estos estilos. La intensidad global baja, a pesar de la contundencia de la letra, al ser la composición más estática. Cuenta con la colaboración del guitarrista de Zenobia y Scarlett Animal, Víctor De Andrés. El sentimiento continúa con “¿Quien soy yo? /sin el puto rock and roll)”, un tema de alabanza al rock and roll y a la figura del rockero bala perdida que disfruta de la pasión y la decadencia de su estilo de vida. Aunque en los directos funciona muy bien y la sala se convierte en un mar de coros y puños en alto, a mi me resulta un tanto típico. Y, de pronto, hay un giro más intrigante con “Señores del invierno”, un tema que habla de un ejército de caminantes blancos de Juego de Tronos y que tiene un solo colorido que evoca aventuras y batallas ancestrales. Es más oscuro y tenebroso, con guitarras más densas. “La balada de Trafalgar” tiene temática marcial y habla la batalla marítima de la que lleva el nombre. Te hace sentir la sal en tu piel y en tu olfato la pólvora de los cañones y el olor a chamuscado de los navíos que la nave de nuestros protagonistas ha hundido. También el valor y el arrojo de los soldados. “Volví a ganar” es un medio tiempo armonioso, intenso y pesimista lleno del resentimiento y la rabia propios de quien acaba de perder una relación. Es en el que  más la ejecución vocal resulta más elegante e inspiradora y la composición presenta más giros y variedad.  Apocalipsis es un interludio instrumental, puesto bastante al final del disco, lo que resulta poco común y sorprende. A pesar de su brevedad son interesantes la multiplicidad de matices y las  evoluciones de ritmo y compositivas que presenta. En ese sentido, me parece el tema más interesante del conjunto, y encaja perfectamente con “Terra Ignis”, el homónimo del disco. “Terra Ignis” es el broche final que despide el trabajo con energía y crueldad. Apocalíptico y condenatorio desde el punto de vista cristiano, vigoroso y lleno de diversidad, resulta un final cautivador para el CD de la experimentada banda de Heavy Rock, aunque en algunos momentos la dicción coarta un poco la experiencia.
“Terra ignis” es un CD que gustará a fans de las fórmulas clásicas con innovaciones y con una composición franca, espontánea y sin muchas variaciones o cambios. Si gustas de más matices, puede resultar interesante pero un poco plano. Se trata de un trabajo con empuje y soltura cuyas  letras agresivas, bélicas y desenfadadas encienden la sangre y llenan de determinación.

 

 
Rock-CD Records (2017)
Puntuación: 6/10

 

Noelia Montalbán
Noe@queensofsteel.com

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